El Camino de Santiago se ha convertido en una de las peregrinaciones más importantes y conocidas del mundo, la cual es realizada cada año por miles y miles de personas que buscan experimentar esta aventura plagada de misterios, tradiciones y leyendas. Pero, ¿cuál es realmente el origen de este fascinante itinerario? La realidad es que para encontrar las raíces del recorrido tendremos que remontarnos a la religión y a la época de Jesucristo para así centrar la mirada en uno de sus doce discípulos: Santiago Apóstol, hijo de Zebedeo y hermano de Juan Evangelista. 

Según cuenta la leyenda, el cuerpo del citado predicador fue descubierto por un pastor llamado Pelayo en un monte de la antigua Iria Flavia en el siglo IX, durante el reinado de Alfonso II.  Al parecer, Santiago Apóstol habría muerto unos 800 años antes del hallazgo y sus restos fueron transportados entonces a Galicia por dos discípulos en un bote guiado por ángeles. Cuando el reinante descubrió la historia ordenó construir un templo religioso en aquel lugar sagrado, convirtiéndose así en uno de los centros de peregrinación católica más importantes de todos los tiempos junto con Roma y Jerusalén. En la actualidad, existen más de una decena de variaciones de esta ruta hacia la Catedral de Santiago, tres de las cuales han sido declaradas como Patrimonio de la Humanidad. Sin embargo, de entre todas ellas, el Origen de todos los Caminos conforma una de las experiencias de peregrinación más auténticas de todas cuantas existen, pues el itinerario en cuestión sigue la estela del viaje que hicieron los restos del Apóstol hacia Compostela. 

Desde el origen hasta Compostela

El Origen de todos los Caminos se fundamenta en el relato sobre la llegada de los restos del Apóstol a Galicia; un viaje épico navegando por las aguas de Arousa y el río Ulla. Se trata sin lugar a dudas de un itinerario repleto de historia y tradición xacobea que se mantiene todavía hoy reflejada en la existencia de antiguos hospitales de peregrinos, las imágenes de Santiago e incluso diferentes elementos de la arquitectura popular y religiosa tales como los cruceiros, calvarios, iglesias y conventos. En el presente, este nativo trazado hacia la ciudad de Compostela encuentra a su paso diferentes variantes en las que está incluida la clave para alcanzar el verdadero origen de todos los caminos: desde la Variante Espiritual hasta la Ruta del Padre Sarmiento (variante del Camino Portugués que atraviesa la comarca do Salnés) pasando por la conocida Ruta del Mar de Arousa y Río Ulla, este último surcando las aguas del único Vía Crucis Marítimo-Fluvial del mundo. 

A pesar de todas las opciones, el Origen de Todos los Caminos más auténtico se realiza por mar: desde el corazón de la ría de Arousa, ya sea desde el entorno de la península do Barbanza, O Grove o incluso Vilagarcía de Arousa. Lo importante de este fascinante recorrido también conocido como la Traslatio es seguir los pasos de los discípulos Teodoro y Atanasio con los restos del Apóstol Santiago desde el puerto de Jaffa (Ahora Israel) hasta Galicia en una barca de piedra. Cabe destacar que dicho recorrido marítimo remonta también las aguas del río Ulla hasta alcanzar el entorno de la localidad de Pontecesures, a sólo unos 3 kilómetros de Padrón y realiza los últimos tramos a pie. 

Lo cierto es que cada vez son más las personas que deciden llevar a cabo esta experiencia que tiene una duración de apenas una hora y media en barco y unos 25 kilómetros a pie de Pontecesures a Santiago. En sus primeras etapas marítimas, la travesía en cuestión avanza a través de puntos tan característicos como la isla de Cortegada, las famosas Torres do Oeste o el emblemático calvario de Punta Patiño ya en los límites de Rianxo. De hecho, el Vía Crucis Marítimo-Fluvial es lo más interesante que podrán ver los peregrinos en su viaje desde la ría de Arousa, pues en todo el itinerario se llegan a contar hasta 17 cruceiros, 12 de ellos totalmente visibles. 

La conmemoración de la Traslatio en plena Navidad

Otra de las grandes curiosidades sobre esta ruta original es que la celebración de la "Traslatio" se encuentra constatada desde el año 1588, si bien no sería hasta 1646 cuando las Cortes de Castilla darían oficialidad a la conmemoración. Es por ello que desde hace tiempo el municipio de Padrón constituye un enclave también sagrado cuya identidad e historia se encuentran vinculados de forma directa a las peregrinaciones a Santiago de Compostela. Lo cierto es que en la actualidad, cada 30 de diciembre desde hace varias décadas, tiene lugar en esa villa gallega un acto solemne que pretende rememorar el viaje de los restos del Apóstol.