La provincia de Ourense cuenta con infinidad de peculiaridades. Se conoce como la "terra da chispa" por su vinculación con la profesión de afilador, también como la capital del termalismo y como epicentro del Entroido gallego por su riqueza cultural y ancestral en este sentido.
Pero hay también un Ourense milenario que se encuentra en lugares como San Pedro de Rocas, el conjunto monacal más antiguo de Galicia, o en aquellos municipios que atesoran decenas de petroglifos. Este arte rupestre aflora, a menudo, entre la maleza o, lamentablemente, sale a la luz tras incendios devastadores. Hay también arqueólogos o historiadores que, por cuenta propia, se dedican a investigar estos vestigios fechados entre el Neolítico -entre el 10000 y el 3000 antes de Cristo- y la Edad de Bronce -2250-1900 antes de Cristo-.
Uno de los municipios que se considera punto caliente de este arte rocoso se encuentra en la Comarca de Monterrei y cuenta con apenas 1.606 habitantes. Se trata de Cualedro, en donde también se conserva, a 780 metros de altitud, un castro -que vendría a reforzar su condición de antigüedad- que ya habría estado ocupado en el siglo V antes de Cristo, tal y como precisan desde el Concello. Se trata del Castro da Saceda y en él se hallaron, a posteriori, monedas romanas de plata y fragmentos de cerámica.
No muy lejos de este yacimiento, entre los montes de las distintas parroquias y pueblos que conforman el concello ourensano de Cualedro, se pueden descubrir -y, no sería sorprendente, hacerlo por primera vez-, elementos artísticos rupestres en los que todavía se pueden adivinar sus formas: Las hay desde más simples -pequeñas hendiduras en forma de cuenco que reciben el nombre de "cazoletas"- a otras que reflejan diferentes formas que podrían relacionarse con siluetas humanas.
A pesar de que no es en Ourense, sino en Pontevedra, donde se encuentra la mayor concentración de petroglifos de toda Europa -en el Parque Arqueológico de Arte Rupestre de Campo Lameiro hay un total de 80, entre ellos, el conocido como "A Laxe dos Carballos"- los encontrados en municipios como el de Cualedro acreditan éste último como uno de los más antiguos de Galicia.
Cualedro
El Concello de Cualedro cuenta con diez parroquias y una extensión de 117 kilómetros cuadrados entorno a los que se pueden encontrar enclaves arqueológicos y naturales únicos. En el último apartado se encontraría la conocida como Serra do Larouco y, a los pies de ésta, la bautizada como Pena Muller -un conjunto granítico en el que se pueden adivinar distintas formas antropomórfícas-.
Sin duda, existen muchas razones para visitar Cualedro. Quizá una de las más importantes, además de su proximidad con Portugal, la posibilidad de reencontrarse con la historia más antigua y de conocer cómo vivían y se comunicaban nuestros ancestros.