El Pazo Torrado acoge un nuevo diálogo entre el arte y los cuerpos en Cambados
Andrea Davila, Mar Ramón y Nuria López son las artistas protagonistas de la exposición colectiva "Un golpe na mesa e unha caricia ata o teito", centrada en los procesos de creación escultórica que tienen como raíz lo corporal
Cambados es, en sí mismo, un auténtico museo al aire libre. Esta localidad de la comarca do Salnés presume de uno de los conjuntos antiguos mejor conservados de Galicia, con majestuosos pazos señoriales, avenidas nobles y un rico patrimonio monumental que adorna cada rincón de la histórica villa. Sin embargo, su legado artístico no se límita únicamente a sus calles: Cambados refuerza su apuesta cultural a través de todo tipo de exposiciones y eventos que encuentran su refugio en el emblemático Pazo Torrado, un espacio que enriquece el vibrante diálogo entre la tradición y el arte contemporáneo.
El actual museo y sala de exposiciones cambadesa acoge desde hace unos días una nueva muestra colectiva, comisariada por Sandra MB, y "centrada en los procesos de creación escultórica que tienen su raíz en lo coporal". Bajo el título evocador de Un golpe na mesa e unha caricia ata o teito, la nueva propuesta artística del Pazo Torrado se encuentra firmada por tres indómitas artistas: Andrea Davila, Mar Ramón y Nuria López, las cuales, en sus diferentes formas y narrativas, utilizan el cuerpo y su dimensión sensional para crear sus particulares piezas escultóricas.
La exposición colectiva podrá disfrutarse hasta el próximo 29 de diciembre en el horario habitual de la sala de exposiciones del Pazo Torrado, es decir, de martes a viernes entre las 11:30 y 13:30 horas y de 17:00 a 20:00 horas, los sábados en horario de tarde y los domingos en horario de mañana.
La sintonía de los cuerpos y esculturas
Un golpe na mesa e unha caricia ata o teito propone al espectador un viaje artístico donde el cuerpo actúa como conductor para explorar las complejidades de la experiencia humana, creando espacios para la reflexión a través de la interacción de estos cuerpos con el entorno y los materiales. En esta suerte de exposición colectiva en las entrañas de Cambados, tanto Andrea Davila como Mar Ramón y Nuria López se rinden a la raíz corporal para crear sus propias obras y transfondos. En el caso de Andrea Davila, por ejemplo, la artista pontevedresa explora la relación entre el cuerpo y los elementos naturales, como "o despregamento dunha flor que no proceso transfórmase nun abrazo performativo (se convierte en su opuesto)". La ambigüedad de sus imágenes invita al espectador a cuestionar y explorar los múltiples signifcados que se encuentran detrás de cada representación visual.
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Valenciana de nacimiento, pero residente en Galicia, Mar Ramón Soriano juega con la verticalidad de los cuerpos y las estructuras arquitectónicas para sacar a relucir las distintas dinámicas de poder, que en esta muestra colectiva puede verse claramente gracias a un conjunto de obras realizadas durante su estancia de investigación en Nueva York. Por su parte, Nuria López introduce en sus diferentes piezas conceptos como la espera o la tensión, en un proceso artístico y escultórico centrado en el cuerpo y los materiales de proximidad. En el trabajo de esta artista multidisciplinar la fragilidad se alza como una constante de su narrativa, manifestándose a través del gesto y el vacío corporal, y logrando otogar presencia a todo aquello que parece intangible.
Más espacio para el arte en la Sala B
De forma paralela a la exposición colectiva, la Sala "B" del Pazo Torrado también acoge estas semanas una muestra especial en colaboración con la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Vigo. La exposición Motes, de Pepe Eiras, podrá ser visitada hasta el próximo 10 de noviembre y se compone de una serie de lienzos concebidos para desafiar nuestra percepción sobre el arte. El conjunto artístico ―e interactivo a través de códigos QR― invita a reflexionar sobre cómo ciertos criterios objetivos influyen en la recepción de las obras de arte, variando significativamente según el tipo de espectador y el bagage artístico del mismo. Motes es, sencillamente, un diálogo sobre el modo en que las experiencias personales moldean nuestra manera de observar el mundo y valorar el arte.