A menudo caminamos por las calles de la ciudad sin reparar en todos los secretos que guardan, sin notar que nos rodea un enorme patrimonio histórico y cultural que, como un tesoro escondido, se mantiene a la vista pero fuera del foco. La realidad es que las calles de cientos de pueblos y ciudades se han convertido en auténticos museos al aire libre, donde monumentos y esculturas esperan pacientemente para sorprender al visitante más curioso, revelando framentos de la historia en cada paso.
Por eso, en esta ocasión, queremos invitarte a descubrir los misterios que ocultan las esculturas urbanas de Redondela: unas figuras simbólicas nos hablan en susurros de las leyendas y memorias que dan vida a este mágico rincón bañado por las aguas de la ría de Vigo.
As Penlas
En el verano de 2003, la Praza da Constitución se convirtió en el escenario de uno de los monumentos más emblemáticos de Redondela: la escultura das Penas e as Burras, un conjunto que rinde homenaje a la Danza das Espadas celebrada durante la Festa da Coca. Esta creación en bronce del escultor ourensano Acisclo Manza se alza imponente en las entrañas del pueblo, con sus 2,55 metros de altura y un peso que ronda los 400 kilos. La escultura se compone de dos piezas que representan a sendas figuras femeninas que, en su misteriosa quietud en movimiento, parecen custodiar las leyendas más míticas de Redondela.
Monumento ao Capitán Nemo
En a la playa de Cesantes, frente a la pequeña isla de San Simón, el horizonte marino deja entrever la silueta del capitán Nemo en un monumento extraordinario que homenajea una de las novelas más célebres del escritor francés Julio Verne, Veinte mil leguas de viaje submarino (1870). "Estamos en la bahía de Vigo y sólo de usted depende que pueda conocer sus secretos", le susurra Nemo al profesor Aronnax en un pasaje memorable mientras trata de recuperar el oro de los galeones españoles hundidos en la batalla de Rande. Junto a la estatua del capitán, otras dos figuras de unos buzos emergen a la superficie únicamente cuando la marea está baja. Todas estas piezas, esculpidas por Sergio Portela según el diseño del fallecido Moncho Lastra, invitan al visitante a sumergirse en las historias y leyendas más enigmáticas de la ría de Vigo.
Monumento aos Mariñeiros en Cesantes
El verano de 2004 marcó un trágico capítulo en la historia más reciente de Redondela. Diez marineros gallegos, siete de ellos hijos de esta tierra, perdieron la vida en el naufragio de O Bahía, a tan sólo cuatro millas de las islas Sisargas. Un año más tarde del suceso, en la playa de Cesantes se erigió un enorme monolito que convertía a este lugar en un altar eterno en recuerdo de las víctimas. La obra está compuesta por cuatro grandes bloques de granito que representan las cuatro provincias gallegas. Por su parte, los vidrios blindados que acompañan al conjunto escultórico y que simbolizan el mar, unen tierra y aire en un tributo al océano que se llevó a los marineros pero dejó viva su memoria.
Monumento da Virxe de Cesantes
No sería hasta el año 2014 cuando la parroquia de Cesantes sumaría otro de sus monumentos más icónicos: una espectacular escultura dedicada a las gentes del mar, ubicada, como el Capitán Nemo, en el entorno del arenal da Punta. La Deputación de Pontevedra encargó a la Escola de Canteiros de Poio la creación de esta imponente imagen en granito de la Virxe do Carme, la cual preside desde entonces una pequeña capilla en su honor. La escultura en cuestión, obra de Rubén Gil, alcanza los 2,70 metros de alto, 1,20 metros de ancho y un peso aproximado de 4,500 kilos, como símbolo de la fortaleza y devoción de quienen escomiendan su vida a los oficios del mar. Tras su instalación, un tiempo después se añadió una talla con versos del trovador Mendiño dedicados a la isla de San Simón, uniendo en la piedra el eco eterno de la fe y la tradición.
Monumento as Persoas Represaliadas pola Dictadura
El 90º aniversario de la proclamación de la II República española fue la fecha elegida por el Concello de Redondela para inaugurar el Monumento as Personas Represaliadas pola Dictadura, una obra cargada de simbolismo y memoria histórica. Creada por la Escola de Cantería da Deputación de Pontevedra, la escultura se erige en el alto da Concheira con vistas directas hacia la ría de Vigo, en uno de los lugares más significativos para la memoria histórica de Galicia. Como curiosidad, el conjunto formado por tres figuras enlazadas presenta una altura total de unos 2,30 metros y un peso cercano a las cinco toneladas.
Escultura Xan Carallás
Xan Carallás es un personaje de índole burlesca y origen incierto al que la tradición atribuye la fundación de Rendondela. Carallás es también famoso por protagonizar la mítica copla popular que reza así: "Aquí xaz quen sempre xaz / Aquí xaz quen sempre vela / Aquí xaz Xan Carallás / Fundador de Rendodela". La escultura de este legendario personaje, creada por el escultor Juan Vázquez Pérez, se alza en pleno corazón de la Alameda Castelao, donde permanece desde hace unos años como un símbolo entrañable del folclore local y la picardía gallega.
Monumento a Castelao
En los jardines de la Alameda se puede contemplar una obra de arte dedicada a Castelao, uno de los grandes referentes de la cultura gallega, instalada con motivo del centenario de su nacimiento. Creada por el escultor Alfonso Vilar, la obra en bronce de estilo figurativo fue inaugurada el Día das Letras Galegas de 1987, culminando con ello una serie de actos que habían comenzado ya un año antes. La escultura descansa desde entonces sobre un enorme pedestal de piedra, al cual se añadieron en años posteriores dos placas conmemorativas en su base. Una en homenaje a los 50 años de su muerte (2000) y otra por el Centenario del Himno Galego (2007), aunque, tristementes, ambas fueron robadas en el año 2015.
Escultura a Eduardo Blanco Amor
Narrador, poeta y dramaturgo, Eduardo Blanco Amor (1897-1979) dejó una huella imborrable en la cultura y literatura gallega, destacándose especialmente con su obra A Esmorga (1959). Originario de Ourense, Blanco Amor se encumbró como uno de los grandes pilares de la renovación narrativa en Galicia, convertido en una figura esencial dentro del mundo de las letras. Pero, ¿Por qué Redondela le dedicó una símbolica y controvertida escultura en 1982? Con motivo de la creación del Premio Blanco Amor de literatura por iniciativa del Concello de Redondela, se decidió rendir homenaje al escritor con la colocación de una estatua. La pieza, obra de Juan Otero García "Eiravella", representaba una figura masculina con un niño en brazos, acompañada de otros cuatro muchachos en su parte posterior. La escultura se mantuvo por un breve período de tiempo en las entrañas de la Alamade, pero tras recibir innumerables críticas, fue desplazada a la parte final del aparcamiento del campo da feira y sustituida por un reloj de sol.
Fragmento del Muro de Berlín
Existen más de 400 lugares en todo el mundo donde se pueden encontrar fragmentos del Muro de Berlín, y Redondela es uno de ellos. Aquel imponente bloque de hormigón se convirtió en uno de los grandes símbolos de la Guerra Fría, marcando la división de un mundo en dos blosques y sistemas opuestos allá por el siglo XX. Ya a principios de los años noventa, Manuel Figueroa Suárez cedió al Concello de Redondela dos fragmentos de aquel legado pétreo. Sin embargo, por aquel entonces no se valoró lo suficiente y las piezas permanecieron colgadas de un pilar del viaducto de Ourense durante años. Con el tiempo, se decidió recuperarlas, restauralas y devolverles su significado, colocándolas en 2011 dentro de una vitrina en los jardines da Xunqueira, donde todavía hoy un pedacito de la historia sigue latiendo con fuerza en Redondela, recordándonos a todos los ecos de un pasado no tan lejano.
Monumento a Valle-Inclán
En el año 2004 la Praza Figueroa se convirtió en el enclave elegido para un curioso busto dedicado al genio literario que llevó el esperpento a toda España: Ramón María del Valle Inclán. Este primer lugar en el que habitó durante años la figura pétrea del vilanovés no fue un escenario escogido al azar, pues en aquella plazoleta se encuentran los dos primeros locales que acogieron la Biblioteca Municipal de Redondela, la cual recibe el nombre de Valle-Inclán. Ahora bien, la escultura fue trasladada en el año 2022 a la puerta del Multiusos da Xunqueira, sede del actual espacio bibliotecario de la localidad.
Monumento a Rosalía de Castro
La Alameda de Redondela se ha convertido en el escenario ideal de las esculturas urbanas, y desde 2018, una nueva pieza rinde homenaje a Rosalía de Castro, sumándose de esta forma al resto de monumentos pétreos que adornan este rincón de la ciudad. Se trata de una obra creada por el escultor ourensano Toni Ferrer, que captura la esencia de la autora gallega con una elegancia casi atemporal. En su base, una inscripción inmortaliza su legado con las siguientes palabras: "En lembranza de Rosalía de Castro, muller universal das nosas letras".