En julio de 1985, comenzaron las emisiones en pruebas de la Televisión de Galicia, concretamente, el 24 de ese mes, víspera del Día de Galicia y de Santiago Apóstol. Parecía la mejor fecha, en pleno verano, para comenzar con los experimentos de un canal que se estrenaba en gallego y en el que comenzaban a asomar, por ejemplo, un Xosé Ramón Gayoso con un tupido cabello. A finales de septiembre de ese año, comenzaría a funcionar con 39 horas semanales.
En esos primeros meses, una serie brilló por encima de toda la programación: Dallas, la serie americana que narraba los entresijos de la familia Ewing, multimillonaria, poderosa y muy influyente en el estado de Texas, y en cuyo reparto destacaba el personaje de J.R.
Detrás del rostro iracundo del americano, se encontraba la voz de Antón Cancelas, una referencia en el mundo del doblaje y que pronunció una frase que, años después, serviría de lema para camisetas: "Estás bébeda, Sue Ellen".
Siendo el doblaje un sistema de emisión habitual en las televisiones nacionales, en Galicia su canal autonómico era el vehículo perfecto para dar a conocer el gallego y, sobre todo, quitarse el sambenito de que era una lengua de aldea, normalizando su uso. Para esta misión, fue básica la adaptación del lenguaje usado en los grandes éxitos de Hollywood a un gallego que, a pesar de ser normativo, recogía las formas, el acento y las particularidades de un idioma que no suena igual en el norte que en el sur.
El redescubrimiento del "Estás bébeda" abrió los ojos a muchos, que empezaron a fijarse y a recordar cómo los doblajes gallegos se habían convertido en ese intangible que la memoria moldea y al que gusta regresar cada poco tiempo. Especialmente, a aquellos que salían de Galicia para estudiar o trabajar, que presumían de tener la mejor canción de As Bolas Máxicas.
Es curioso, por otra parte, que la mítica frase de J.R., traducida para la TVG por la coruñesa Susana Carral, no es tan celebrada en otras comunidades autónomas con televisión propia, como Cataluña. Allí, en la TV3, la que se hizo "viral" fue otra dentro de la misma conversación entre J.R. y Sue Ellen: "Ets un pendó!", es decir, "eres un pendón".
La huella de Antón Cancelas
Cancelas, fallecido en 2021, no sólo dejó esta frase para la posteridad, sino que fue la voz de actores como Schwarzenegger, Clint Eastwood, Tommy Lee Jones o Anthony Hopkins, entre otros. Precisamente, una frase del actor austriaco y ex gobernador de California en la película Terminator 2 también locutada por el gallego, fue elegida la mejor de la historia del doblaje de la TVG, según una encuesta realizada en 2010 en Twitter por la Secretaría Xeral de Medios.
Nos referimos, efectivamente, a "a rañala, raparigo", que entona el cyborg, y que en la versión original era un "hasta la vista, baby" y en la traducción española "sayonara, baby". Parece claro que ninguna caló tanto como la gallega, que conseguía traer hasta Galicia aquella historia distópica dónde los robots se levantan contra los humanos.
Otro de los grandes éxitos de la programación de la TVG fue As bolas máxicas, la serie de Akira Toriyama con Son Goku como protagonista y que ha dejado también para la posteridad otras como "es un pimpín, Son Goku" o la amenaza de Vexeta "voute esnaquizar, miñoca". Esta última, confesaba Julio Lorenzo, otro de los referentes del doblaje y que le puso su voz al Goku gallego, en una entrevista publicada en el Atlántico había sido una improvisación: "Eso es prácticamente obra, al igual que el "onda vital", del director, Antón Pazos. En una de estas genialidades que tenía, cuando no nos encajaba nada en el texto, nos dijo ‘dille aí voute esnaquizar, miñoca’. Totalmente improvisado".
Para el público juvenil también era un referente la serie Batman, que tras la retahíla de versiones del héroe de DC Comics que se lanzaron desde 1989 con la película dirigida por Tim Burton, se convirtió en "el Batman de la Gallega". Adam West en su traje grisáceo y capa violeta le decía a su compañero "Oíches, Robin? Estrágamo-lo Batmóbil contra un penedo!". Por supuesto, Robin reaccionaría con su clásico "Santos morcegos, Batman!". También Magnum saludando con un "que tal, nachos" después de que la voz en off gritase su nombre en los títulos de crédito con una mezcla de emoción y rabia.
Los clásicos del cine en gallego suenan mejor; al menos, diferente. El "Luke, eu son teu pai" lo recitó Tacho González, pero el personaje de Han Solo, doblado por Luis Iglesia, deja otra para el recuerdo que en otras versiones de la saga Star Wars seguro que pasó desapercibida: "Terma Chewie, que escorrego", dice sobre el ala del Halcón Milenario. A su peludo socio también le espeta un "E ti que ris, furabolos!", después de que Leia se refiera a Solo como un "miolos de láser".
Estos doblajes han permitido escuchar a Silvester Stallone gritar "Pensei que ía pras patacas!" cuando casi tiene un accidente con el coche en Demolition Man, que aquí se conoció como O demoledor. O el mismísimo Al Pacino en El precio del poder, en el que Tony Montana le suelta a Many "róncalle o carallo", en lugar del "hay que joderse". O el galán Clark Gable en su recordado papel de Rhett Butler, lanzándole un "Francamente querida, impórtacheme un carallo" a Scarlett O’Hara en Lo que el viento se llevó.
Del refranero a las expresiones fuertes
El refranero popular gallego también se hizo un hueco en el drama Mystic River, donde Sean Penn cambia el "de tal palo, tal astilla" por "fillo do porco, marrán seguro". También aparecen personajes clásicos de la cultura popular, como en Hot Shots 2, donde Charlie Sheen, tras recibir un golpe en la cabeza, lamenta "Escomezamos a mañá cunha tonada de Ana Kiro".
Deja también para la historia de estos doblajes diálogos duros, expresiones fuertes que viajan desde Estados Unidos hasta el noroeste de la península; por ejemplo, en el diálogo de Instinto Básico entre el personaje interpretado por Michael Douglas, Nick Curran, y su compañero de investigación, Gus Moran, que tras conocer que se había acostado con Catherine Tramell (Sharon Stone), le pregunta: "Como?Fodiches nela?", a lo que sigue "Ti ves unha perrecha e poste tolo".
No falta en este repaso otro personaje al que puso voz Antón Cancelas, el psicópata Hannibal Lecter de El silencio de los corderos, interpretado por Anthony Hopkins, que busca asustar a Clarice con un "podo cheirar a túa crica dende eiquí".
Estas son una pequeña muestra de las cientos de frases que el doblaje al gallego ha dejado, convirtiéndose en referencia para varias generaciones, desde los inicios del Club Xabarín hasta los que ahora rebuscan en internet frases, palabras y expresiones que ya forman parte de la memoria popular de los gallegos Y, lo más importante, a nadie ya extraña ver a una superestrella de Hollywood hablando en gallego.