Múltiples estudios señalan en los últimos años que Panxón pudo haber sido en su momento una villa romana de referencia, un punto de comercio marítimo con Roma e incluso antes de eso, un asentamiento castrexo. Las pruebas que apuntan hacia estas teorías son varias, como el caso del famoso mosaico que a día de hoy se encuentra navegando hacia Galicia desde Nueva York.
El fuerte temporal de la pasada semana reveló nuevas pistas sobre el pasado de la localidad. Tal y como relata Juan González, el alcalde de Nigrán, las fuertes lluvias provocaron la caída de parte de la ladera del ‘castro de Panxón’ hacia la playa de A Madorra. Si bien la parte central de esta especie de península es una propiedad privada, el movimiento de tierras de un lateral se produjo en territorio público, por lo que los técnicos del Concello no dudaron en desplazarse hasta allí a estudiar los daños.
La sorpresa se dio cuando entre el barrizal formado por el temporal comenzaron a surgir diversas piezas, como trozos de cerámica (de origen romano según el primer estudio visual de los expertos), tejas romanas, abalorios o tres molinos romanos, de acuerdo con las explicaciones del regidor nigranés. Los arqueólogos podrán acceder a estos restos en cuanto se apruebe la petición a Patrimonio de la Xunta de Galicia, que como detalle González, ya ha sido enviada y cuya respuesta esperan recibir el lunes.
Una vez se dé luz verde a la solicitud, el equipo de arqueología contratado por el Concello de Nigrán podrá adentrarse de pleno en el yacimiento y tratar de recopilar y contextualizar los objetos que allí descansan. El objetivo final, según cuenta Juan González, es determinar la fecha de cada pieza y proceder, si resulta pertinente, a su musealización.