Algunos lo recordarán de sus tiempos de la Televisión de Galicia; un joven con larga melena recogida en una coleta que contaba la situación meteorológica en la Comunidad de forma amable y cercana. Ahora, y tras más de una década en la televisión pública estatal, Martín Barreiro se ha convertido en una de las caras más conocidas de la parrilla televisiva española. Pero su fama y los kilómetros que le separan de su Galicia natal no le han impedido mantener un estrecho lazo con esta tierra, en la que pasa una parte importante de su tiempo libre y donde colabora en numerosos proyectos.
Este lucense de 43 años, licenciado en Físicas y especializado en Meteorología y Oceanografía, asegura que estar lejos de casa te hace valorar los pequeños detalles. "Me apasiona el mar, toda la costa gallega. Me apasionan los montes, los valles fluviales del interior. Los olores, los colores y los sabores. ¡No sabes como echo de menos la comida de Galicia!", destaca el meteorólogo gallego, que cuenta que, aunque echa de menos a su familia, amigos y lugares cercanos, algo de él se ha quedado en Galicia y algo va siempre con él y se lo va "mostrando a todo el mundo".
De Vigo y las Rías Baixas no tiene más que palabras de admiración. Define la ciudad olívica como una urbe "vibrante, moderna con mucha personalidad" y asegura que lo mejor que tiene son "las viguesas y vigueses". Y de las Rías Baixas, le costaría elegir algún lugar favorito. "Creo que es uno de los lugares más espectaculares del mundo que yo he podido conocer por ahora", dice.
¿Pero qué hay de ese microclima del que tan orgullosos se sienten los ciudadanos de esta urbe del sur de Galicia? ¿Existe realmente? Barreiro nos saca de dudas: "Pues lo cierto es que sí hay un microclima en la ría de Vigo. Todas las rías tienen un clima suave y más soleado de lo que la gente cree. Las temperaturas de la ría de Vigo son suaves, está bastante protegida de los vientos del norte. Es un lugar especial".
En Galicia siempre llueve
El cómico catalán Buenafuente, del que muchos piensan que tiene una fijación por Vigo y su mediático regidor, decía hace poco en uno de sus monólogos que "poner placas solares en Vigo era como ponerle un toldo a un submarino". Hoy, por fin, tenemos las palabras de un experto para rebatirle, más allá del aluvión de críticas en redes sociales que recibió por tal afirmación.
"Forma parte de las exageraciones repetidas hasta la saciedad, y que son una gran mentira. ¡Por supuesto que no siempre llueve! Es cierto que cuando llegan borrascas a España, los vientos del suroeste dejan muchas lluvias en Galicia, y también en las Rías Baixas. Pero durante muchos días al año los vientos en Galicia predominan del norte y del noreste y con estas condiciones los cielos se quedan azules. En verano hay muchos días de sol y de temperaturas altas en Vigo", cuenta Barreiro.
Además de la lluvia, otra cosa que suele echar atrás a muchos turistas a la hora de decantarse por Galicia para disfrutar de sus ansiadas vacaciones veraniegas es la temperatura de nuestras aguas, en la que decir "fresca" es quedarse algo corto en muchas ocasiones. ¿A qué se debe? Aprovechamos la clase magistral del físico lucense: "Hay un gran secreto que esconden las Rías Baixas. Los vientos del norte que limpian los cielos son los mismos vientos que se llevan el agua de la superficie del mar y eso hace que entre agua con muchos nutrientes, muy fría eso sí, que alimenta la enorme variedad de pescado y marisco".
En un día soleado de verano la diferencia de temperatura entre Vigo y la gran urbe del norte de la Comunidad, A Coruña, puede ser de 7 grados, o más, aún estando a tan solo 150 kilómetros de distancia. Esta diferencia se debe a las altas presiones que predominan en el periodo estival, el Anticiclón de las Azores. "En estas circunstancias soplan los vientos del norte-noreste que comentaba antes, esos vientos son más frescos y húmedos en el norte de Galicia, a medida que avanzan por el resto del territorio se van caldeando, por eso las temperaturas son más altas en el sur. Además, las propias rías van haciendo de parapeto de esos vientos y los van frenando", explica Martín Barreiro.
El "toque" de botón más famoso de España
Si es una de esas personas a las que les gusta la información del tiempo, de los que espera con cierta inquietud el pronóstico semanal, y con algo más de nerviosismo el del fin de semana, y ha seguido la trayectoria de Martín Barreiro, se habrá fijado en que a los pocos segundos de cámara, el presentador, tras años y años de práctica, desabrocha con gran maestría el botón de la chaqueta de su traje. Un ritual para el presentador y sus seguidores del que se han hecho eco hasta en Vanity Fair.
Aunque parezca un guiño, que esconda un secreto o incluso una manía, es mucho más sencillo que todo eso, y responde únicamente al cumplimiento de protocolo y la comodidad. (Risas) "Surgió de forma casual. Presentarse en público y empezar a hablar con traje ha de hacerse con el primer botón abrochado, es una norma de educación en la vestimenta. El problema es que para empezar a señalar en el mapa y llegar a Galicia o Cataluña con el botón abrochado se hacía complicado, por eso decidí abrirlo en cuanto comienza la explicación del pronóstico", apunta el presentador.
Cuando Filomena dio una tregua a Galicia
Las redes sociales se llenaron de cientos de mensajes la semana pasada sobre la idea de que la borrasca Filomena había dado una tregua a la Comunidad gallega. Mientras gran parte de la Península sufría las devastadoras consecuencias de la nieve y unas temperaturas inesperadamente bajas, lucía el sol en Galicia. Curiosamente, esa misma semana, el 14 de enero pero de 1987, una intensa nevada cubrió de blanco las Rías Baixas y las playas de A Coruña, algo histórico y sorprendente que muchos no han olvidado a pesar de haber pasado varias décadas.
¿Volveremos a ver algo así en Galicia? "No se puede decir que haya una regularidad en ese tipo de eventos más extremos. Pero no por ello podemos descartar que pueda volver a suceder", señala Barreiro, meteorólogo, pero como es normal, no adivino… El tiempo lo dirá.