El programa educativo gallego Ponte… nas Ondas ha entrado en el Registro de Buenas Prácticas del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco. La decisión fue aprobada hoy en el 17 Comité Intergubernamental para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial en Rabat en donde solo alcanzaron esta distinción cuatro propuestas a nivel internacional.
Es la primera vez que Galicia, que presenta esta propuesta de manera conjunta con Portugal, logra este reconocimiento por parte de la Unesco. El conselleiro de Cultura, Educación, FP e Universidades, Román Rodríguez, mostró su orgullo "como gallegos" de que un programa de los centros educativos gallegos sirva de "inspiración para concienciar a los jóvenes sobre la importancia de cuidar de nuestro patrimonio y gracias a esta iniciativa nuevas generaciones de todo el mundo aprenderán desde la infancia la importancia y valor del legado cultural y etnográfico".
Además, destacó Ponte… nas Ondas como ejemplo de convivencia trasfronteriza y, como destacó la Unesco en el informe previo a la evaluación, que podrá servir para mejorar el entendimiento en regiones en conflicto que combina radio, educación y patrimonio cultural con una "fórmula eficaz de salvaguarda” en las escuelas a ambos lados de la frontera galaico-portuguesa.
En este encuentro, además de representantes de la Xunta, participaron por parte de Ponte…nas Ondas! Santiago Veloso, profesor y coordinador de la Asociación Cultural y Pedagógica Ponte…nas ondas!; Chus Álvarez, profesora; Dolores Gómez, portadora; Xerardo Pereiro, profesor y antropólogo; Esmeralda Carvalho, profesora; Xerardo Feijoo, profesor; João Manuel Gonçalves, portador, y Álvaro Campelo, profesor y antropólogo.
Ponte… nas Ondas!, impulsado por la asociación cultural con el mismo nombre, es un programa que nació hace 27 años en los centros educativos del sur de Pontevedra y del Alto Minho y no ha dejado de crecer con el objetivo de salvaguardar el patrimonio cultural inmaterial en la frontera galaico-portuguesa mediante la creación de espacios en los que el patrimonio puede practicarse y transmitirse a las nuevas generaciones a través de las radios escolares.