A lo largo de la historia, son muchas las historias artísticas y literarias sobre objetos arrastrados por el mar hasta la costa. En este contexto, el profesor del Departamento de Pintura Manuel Sendón inauguró esta semana Crebas, una exposición individual en la que muestra su visión personal en torno a estos restos encontrados y que podrá visitarse en el Museo do Mar hasta el 31 de enero.  

Crebas es una serie fotográfica realizada entre 2007 y 2020 en un arenal de la Costa da Morte, la playa O Rostro. Si bien se trata de una obra presentada previamente en espacios de toda la comunidad gallega, la propuesta del Museo do Mar, con treinta fotografías de gran formato y un políptico de sesenta más pequeñas, contiene imágenes inéditas.

De alguna manera, con sus retratos de redes, restos y hierros hallados en la arena, la propuesta de Sendón complementa la sección que el Museo do Mar dedica a la historia de los naufragios en Galicia, aportando una mirada más subjetiva. El propio autor afirma que esta institución le parece "el lugar más adecuado para exponer el proyecto".    

Una aproximación al imaginario marítimo de la Costa da Morte 

Sobre su conexión con la Costa da Morte, Manuel Sendón explica que de niño visitaba la región todos los años y hace dos décadas adquirió allí una pequeña casa, su lugar de referencia. Aunque vive en Vigo desde los años setenta, es profesor de Proyectos Fotográficos en la Facultad de Bellas Artes de Pontevedra y ha recorrido toda la comunidad gallega diciendo que “el territorio que siempre ha estado presente en ese recorrido fue la ría de Corcubión”.

Según Sendón, "las características físicas y meteorológicas de este espacio han dado lugar a sucesos sorprendentes", como el naufragio del Prestige , que generó "paisajes apocalípticos", y del Silva Gouveia, que, varada en 1927, emerge cada pocos años en la playa de Cara. "Todo ha aparecido ahí", dice el fotógrafo, "desde fotocopiadoras hasta un montón de cestas para perros y gatos de muchos colores, que parecían más una instalación de arte que un accidente". 

Manuel Sendón dice que su intención es sugerir, invitar al público a imaginar, hacer que "las imágenes funcionen como plataforma de compromiso". Una de las herramientas que utiliza el artista para conseguir sus objetivos es el juego con las dimensiones de los pecios, por lo que los descontextualiza y el espectador tiene que decidir si lo que ve es gigante o diminuto.    

Una de las fotografías de su exposición.

Un oasis en un panorama artístico desolador

La inauguración de Crebas, restringida por la actual situación sanitaria, tuvo lugar ayer jueves y contó con la presencia de Xosé Manuel Buxán, decano de la Facultad de Bellas Artes, Marta Lucio, directora del Museo do Mar de Galicia y Anxo Lorenzo, director general de Políticas Culturales. 

Sobre la situación del arte antes y después de la pandemia, Sendón tiene una percepción precavida y comenta que "las cosas no pintan bien" y que "sería necesaria una preocupación institucional por la cultura". Sin embargo, el docente destaca lo positivo de esta exposición, sobre todo en una ciudad donde "no hay muchos espacios para exponer porque la situación municipal con la cultura es dramática".

El de Manuel Sendón es, junto con Identidades latentes, la segunda inauguración de un proyecto expositivo con participantes vinculados a la Universidad de Vigo que se organiza en el Museo do Mar, por lo que este espacio cultural vigués está siendo uno de los más activos en estos tiempos de pandemia. Las crebas se pueden visitar en el Museo do Mar de Galicia hasta el 31 de enero.