Coudet, sobre la Superliga: "Me encantaría jugar con la Juventus, pero prefiero el mérito"

El culebrón Superliga se dejó notar esta tarde en la Cidade Deportiva Afouteza. En la rueda de prensa previa al Real Sociedad – Celta de mañana, Eduardo Coudet fue preguntado en varias ocasiones por la creación es esta polémica competición y su opinión al respecto.

Sin embargo, el Chacho ironizaba sobre el poco tiempo que había estado vigente el tema; afirmando que "solo había leído los titulares" y ahora ya parecía que no se iba a celebrar.

El argentino señalaba que "es un lindo desafío el por qué llegas a enfrentarte a ese equipo"; comentaba sobre el camino a seguir para poder participar en competiciones europeas, especialmente heroico para clubes como el Celta.

Sin querer mojarse especialmente, apuntaba a la Juventus de Turín -miembro fundador pero ya retirado de la Superliga- como un rival interesante para ese torneo. Pero señalaba que valoraba más "el mérito por cruzarte con esos equipos". Destacar que hace 21 años el Celta eliminaba a la Vecchia Signora con una sonrojeante goleada en Balaídos.

Sin embargo, zanjaba el debate diciendo que eran comentarios "de charla de café" y todo era un tema "que no se había planteado.

Se impuso la visión de aficionados, clubes modestos, gobiernos y UEFA

Tras una jornada del lunes en la que los tibios comunicados de los clubes de La Liga marcaron la respuesta en España a la creación del trofeo, el martes los hechos cayeron por su propio peso.

Los aficionados ingleses -junto con el resto de clubes afectados de la Premier- doblegaron la fuerza de los dueños de sus clubes. Apoyados también por el primer ministro Boris Johnson, lograrían ejercer la presión suficiente para que los conocidos como clubes del Big Six – Manchester United, Manchster City, Arsenal, Tottenham, Chelsea y Liverpool- se retiraran del grupo fundador al filo de la medianoche.

Esta mañana Juventus y Atlético seguían sus pasos, dejando completamente solos ahora mismo en la competición a Barcelona y Real Madrid y llevando a la alegría a miles de aficionados en toda Europa que vieron amenazadas una vez más las esencias del fútbol. El balón, seguirá mandando por encima del dinero.