Este lunes, coincidiendo con la vuelta al trabajo del Celta tras una semana de vacaciones, Luis Campos ha comparecido ante los medios por primera vez desde que asumió el rol de asesor externo; a su lado, el nuevo técnico Carlos Carvalhal y ambos acompañados por el presidente, Carlos Mouriño.

Una ocasión que el técnico portugués ha aprovechado para regalar unas botellas de Alvariño conmemorativas de la victoria del Braga en la Copa el año de su centenario tanto a Mouriño como a Campos. El presidente agradeció el gesto asegurándole que si gana la Copa, harán también botellas de vino con una etiqueta especial.

En la comparecencia, Campos aprovechó para hablar de su proyecto, que "es el proyecto del Celta", ya que "nada ni nadie está por encima del club", y destacó lo especiales que es para él estar en el equipo y en la ciudad, ya que la visitaba habitualmente con su padre "para comer algo, hacer compras, venir a El Corte Inglés y a ver al Celta", además de que le encanta La Liga, donde ya trabajó hace años de la mano de José Mouriño en el Real Madrid. "Creo que el Celta es un club muy bien estructurado, muy bien pensado, en una ciudad muy especial que tiene que seguir creciendo, porque creo que puede tener un futuro brillante por delante", ha asegurado Campos.

Sobre el cambio de Coudet por Carvalhal, aseguró que fue "un placer muy grande" trabajar con el argentino, del que le encanta "su fútbol y su manera de jugar", pero consideró que el equipo, tras comenzar muy bien la temporada, había sufrido un bajón que hacía necesario un cambio, además de reconocer que "el contexto de la pretemporada generó mucha tensión". La llegada de Carvalhal la vio como "una gran oportunidad", un técnico con el que comparte metodología y del que destaca, más allá de su currículum, que "encaja muy bien en el proyecto del Celta".

Además, Campos ha descartado acudir al mercado de invierno salvo "circunstancias muy especiales", ya que considera que el trabajo que se hizo en verano fue muy bueno "en un contexto muy difícil", logrando "el 90 o 95%" de los jugadores que eran objetivo para una renovación necesaria del equipo, aunque faltó "un jugador capaz de aportar por delante soluciones individuales", más adelantado que Denis, para el que se contó con Oscar y Gabri Veiga para sustituirlo. La llegada de este jugador también la solicitó Carvalhal tras tomar las riendas del equipo.

En cuanto a la pretemporada que se llevará a cabo durante la disputa del Mundial, Carvalhal ha revelado que disputarán un partido interno este sábado en Balaídos, con la intención de que sea de puertas abiertas para los aficionados, dos partidos contra equipos portugueses, Boavista y Vizela, la semana siguiente, y otros dos en Inglaterra contra Brentford y Fulham, antes de enfrentarse al Gernika en Copa del Rey.