En enero del año pasado, Isco viajó a Alemania para fichar por el Unión de Berlín. El futbolista malagueño llevaba cuatro meses en el Sevilla tras su salida del Real Madrid, pero finalmente el fichaje por el equipo alemán se rompió y regresó a España.

El mediapunta rescindió su contrato con el equipo hispalense, donde había tenido una discusión con el director deportivo, Monchi. Isco se quedó sin equipo durante los meses siguientes, hasta que este verano el Betis lo rescató. De la mano de Manuel Pellegrini, ha vuelto a reencontrarse con su fútbol y a ser uno de los mejores jugadores de La Liga. Pero antes que verdiblanco, Isco pudo vestir la celeste.

Así lo ha revelado en el programa de Movistar+ Universo Valdano. Todo ocurrió a su regreso de Berlín. "A la vuelta, recibo una oferta del Celta", explica Isco. "Me llamó Iago Aspas y dije: ‘Es que no puedo. Necesito descansar. Necesito reciclar ideas, la mente… No puedo aceptar una oferta porque no considero que esté preparado para rendir, sobre todo mentalmente, porque físicamente estaba bien", reconoce el futbolista. "Ahí lo tuve claro", sentencia.

En la entrevista con Jorge Valdano, revela que decidió no escuchar ninguna oferta y tratarse "bien mentalmente" para volver "más fuerte que nunca"; para ello, comenzó una terapia con un psicólogo. Ahora, reconoce, "vuelve a disfrutar del fútbol como un niño pequeño" en el Betis.

Isco-Aspas-Veiga

Las palabras de Isco han resonado en las redes sociales, especialmente entre los aficionados del Celta, que han fantaseado con cómo hubiese sido el encaje del andaluz en el esquema del equipo que entrenaba Carlos Carvalhal, acompañando a Gabri Veiga y al propio Iago Aspas.

Esta temporada, tanto Isco como Aspas, que superan la treintena, han destacado en las primeras jornadas como los futbolistas que más ocasiones de peligro han generado en toda Europa y con más acciones de alto impacto en LaLiga; ambos, empatados en lo más alto de ambos rankings.