El estadio vigués de Balaídos vivió este sábado la locura tras un impresionante recital futbolístico de Iago Aspas, que alejó a los celestes de los puestos de descenso en su remontada que acababa con un 4-1 contra Las Palmas.
A pesar de que los canariones eran los encargados de abrir el marcador con un gol de Herzog en el minuto 11, el de Moaña fue responsable de que la angustia durase menos de media hora y abrió el marcador vigués en el 37. Dos minutos después, el Príncipe de las Bateas volvía para dejarle un pase que Swedberg convertiría en el desempate.
La segunda parte, con los celestes más relajados, no faltaron las ocasiones, que se materializaron en un gol de Douvikas en el 71, otra vez con pase de Aspas, y el último del de Moaña en el 76. Balaídos no tuvo más remedio que rendirse ante su príncipe, que volvió a demostrar por qué es, sin duda alguna, el favorito de la afición.
Con esta victoria, el Celta se sitúa a seis puntos del descenso, aunque con un partido más que el Cádiz, que le pisaba los talones hasta esta mañana. Los de Giráldez demostraron que no todo es sufrir para la afición celeste, a la que se acercaron al final del encuentro para agradecer su apoyo incondicional.