La reunión entre el Concello de Pontevedra, la Fundación Rías do Sur, gestora de las instalaciones acuáticas, y los clubes usuarios de las mismas han dado un nuevo paso con el fin buscar soluciones sobre el futuro de estas instalaciones, cuyo futuro incierto se extiende ya a lo largo de casi una decena de meses.
A la espera de encontrar una solución para la apertura de la piscina olímpica, la única de la provincia, el Concello ha anunciado que subvencionará a los clubes deportivos que usan estas instalaciones con el fin de colaborar en su mantenimiento y que pueda permanecer abierta la piscina de 25 metros al menos hasta el mes de febrero.
"El Ayuntamiento está dispuesto a favorecer cualquier alternativa que permita desarrollar la actividad, aunque sea en precario, mientras no se proceda al llenado de la piscina de 50 metros. Estamos dispuestos a colaborar incluso económicamente", explicó el concejal de Deportes, Tino Fernández, al finalizar el encuentro en el que también participó el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores.
El concejal pontevedrés recordó que la intención del Consistorio es la de colaborar en todo lo posible pero aseguró que "la piscina no es nuestra y tenemos dificultades para firmar acuerdos o convenios de financiación con la Fundación".
Por su parte, el alcalde, Fernández Lores, indicó que el Ayuntamiento adelantó que la solución definitiva, que deberá concretarse en datos y cifras en la reunión del próximo mes de enero, momento en el que esperan la Fundación realice una serie de "previsiones de gastos" para poder contar también con la piscina de 50 metros.