Nacida en Pontevedra en enero del 2000, comenzó a jugar al fútbol cuando solo tenía seis años. Se formó en las canteras de la Agrupación Juvenil de Lérez y el Poio Pescamar Fútbol Sala, creció en el Deportivo de A Coruña y juega en el Real Madrid desde 2020. Teresa Abelleira Dueñas tiene a sus escasos 23 años una ficha que muchas envidiarían y que le ha garantizado un puesto en la primera final de la Selección Femenina de Fútbol, que ha hecho historia de España solo con clasificarse.

Tere es la tercera de los hermanos de la familia Abelleira y ha conseguido ser una de las grandes protagonistas del equipo femenino que está haciendo soñar a todo un país. Después de haber sido titular en todos los encuentros disputados por la roja en este Mundial Femenino, la pontevedresa se ganó su merecidísimo puesto en la historia deportiva de España tras marcar el mejor gol de la competición en el encuentro contra Zambia.

Con el número 3 en su espalda, Tere Abelleira ha demostrado con esfuerzo y sacrificio que merece jugar cada minuto en el que Jorge Vilda confía en ella sobre el campo. En pocas semanas, la joven ha logrado estar en boca de todos los gallegos y, aunque ya ha hecho historia formando parte del primer equipo femenino español que disputará una final, Abelleira piensa seguir luchando para traer a Pontevedra el ansiado título.

"Sueña con goles"

Con solo seis años, Tere Abelleira comenzó a jugar al fútbol en la Agrupación Juvenil de Lérez, gracias al impulso de su padre, que es entrenador, y su hermano mayor, que también juega a fútbol. Durante varios años, además, compaginó el AJ Lérez con el fútbol sala, formando parte de la plantilla del Poio Pescamar. En este equipo, de hecho, fue donde todo comenzó para la joven Abelleira: en el año 2016 fueron campeonas de España cadete y este éxito despertó el interés de los grandes equipos.

Con solo 16 años, Tere comenzó a jugar en a Coruña, en un Deportivo que no dudó en hacerla crecer y enseñarle los pasos necesarios para convertirse en la centrocampista que es hoy. En 2017 se convirtió, junto a su compañera deportivista Raquel Béjar, en la primera jugadora profesional de fútbol de Galicia. Tenía 17 años y ya había sido subcampeona del campeonato europeo sub-17 de la UEFA.

En el año 2019 logra el título de la Segunda División Femenina con el Deportivo y gana el europeo sub-19 de la UEFA con la Selección Española Femenina. Su estratosférica progresión, su asertividad en el campo y su indudable talento hacen que reciba una llamada del Real Madrid, donde milita desde la temporada 2020/21 y con quienes ha cumplido ya los 100 partidos.

Su debut en la roja absoluta llegó precisamente en noviembre de ese año 2020, cuando sustituyó a Aitana Bonmartí en los últimos minutos de un partido contra Moldavia. Casi medio año después, en abril de 2021, Abelleira saltaba al campo como titular por primera vez con el 17 a la espalda y muchísimas ganas de continuar haciendo crecer su propia leyenda.

Un referente con los pies en la tierra

A sus 23 años, Tere Abelleira ha recibido miles de cumplidos, ha protagonizado cientos de portadas y es consciente de que se ha convertido en todo un referente para las niñas españolas del siglo XXI. Ha sido comparada con la ribeirense Vero Boquete y hace algunos años prometió en una entrevista (entre risas) que llegaría a ser mejor que ella… y puede que lo esté consiguiendo.

Poco a poco, partido a partido, la pontevedresa se ha visto crecer y, sobre todo, ha visto cómo su sueño también crece con ella cada día y la hace un poquito parte de esta leyenda que ya es la Selección Española Femenina. No obstante, la magia de Abelleira reside también en su humildad y en su amor por el fútbol y por su familia: sus padres han visto cada encuentro en directo y, por supuesto, la acompañarán en la histórica final.

Este domingo, además, la pequeña de los Abelleira tiene un aliciente especial, sabiendo que su madre, Teté Dueñas, estará en la grada animándola mientras celebra su propio cumpleaños. El resto de la familia, contaban hace unos días en redes, disfrutará del partido desde Pontevedra, que se ha volcado para animar a la joven futbolista y que ha instalado una pantalla gigante para vivir un emocionante y multitudinario evento en una de sus plazas más emblemáticas.