El nadador paralímpico gallego Chano Rodríguez anunciaba hace dos días su retirada a los 67 años de edad y hoy ha hecho público el motivo: un resultado "adverso o positivo en la muestra recogida en un control de dopaje", realizado el pasado 12 de julio durante una concentración con el equipo nacional en Sierra Nevada.

El deportista ha querido hacer público un comunicado en el que explica su versión de los hechos y resalta que "desde el primer momento" admitió ante la Comisión Española para la Lucha Antidopaje en el Deporte (Celad) la comisión de una "infracción de simple presencia de sustancias dopantes". De hecho, no presentó recurso para no "alargar el procedimiento" y decidió renunciar a los procesos de selección para las pruebas internacionales, incluidos los próximos Juegos Paraolímpicos de París.

Tal y como detalla, dio positivo por testosterona. "Se trató de una medicación facilitada de absoluta buena fe por un profesional conocido que colabora conmigo desde hace años", apunta, "Desde luego, ninguno de los dos pensábamos que dicha sustancia podría ser considerada prohibida".

"Cometí el error y la equivocación de haber consumido suplementos que contenían tales sustancias prohibidas fruto de mi desconocimiento inexcusable", admite Chano, que defiende que en 29 años de carrera y seis Juegos Olímpicos, "jamás" ha recurrido al dopaje: "Mi prioridad es que no se dude de los méritos y logros deportivos conseguidos anteriormente por mi parte, que he obtenido sin haber tenido que recurrir al dopaje".

El nadador concluye el comunicado lamentando el "daño" que el incidente pueda acarrear al deporte paralímpico español y pidiendo disculpas a los demás deportistas, al Comité Paralímpico Español y a los patrocinadores. "Mi negligencia debe servir a los y las deportistas para aprender a controlar todo aquello que consumen o ingieren, comprobando que no se compromete el cumplimiento de las normas antidopaje".