Septiembre es, para muchos vigueses, un nuevo mes de enero, una época en la que plantearse nuevos propósitos y retos personales para encarar la recta final del año con la mejor actitud. Dentro de esa lista de objetivos es habitual que gran parte de la población se marque metas relacionadas con el aspecto físico; como siempre que termina un periodo vacacional y de descanso, no son pocos quienes sienten ciertos "remordimientos" por haber podido "excederse" en su dieta.

Dejando a un lado los complejos y la culpabilidad, lo cierto es que nunca está mal proponerse llevar una rutina más saludable. Vigo es ideal para llevar a cabo ese plan y no solo por sus empinadas cuestas: en sus alrededores podemos encontrar una variada oferta de senderos, emplazados en bonitos paisajes que hacen mucho más ameno eso de ponerse en forma.

Sin necesidad de pagar suscripción, solo valiéndote de tu propio cuerpo, tal vez algo de compañía, agua y unos buenos zapatos para caminar; aprovecha el entorno Vigo al máximo como si fuese tu gimnasio particular. A continuación te proponemos cinco rutas de senderismo para ponerte a sudar y que puedes recorrer a pie, haciendo running o incluso en bicicleta.

Ruta del Monte Galiñeiro

Sendero PR-G1 O Galiñeiro. Foto: Turismo de Galicia

La senda del Monte Galiñeiro no es apta para personas con miedo a las alturas. Fue el primer recorrido homologado de Galicia y es un clásico en la zona de Vigo, donde atrae a cientos de senderistas. Es una ruta circular de tres horas de duración que arranca desde Vincios y se eleva hasta la cima del Galiñeiro.

En total caminarás nueve kilómetros, a través de los que pasarás por merenderos, el embalse de Zamáns y una panorámica impresionante a vista de pájaro. Está clasificada como una ruta de dificultad media y todos los tramos están señalizados de forma pertinente.

Senda del Auga

Senda del agua de Vigo. Turismo de Vigo

Continuamos con otra ruta clásica de los alrededores de Vigo: la Senda del Agua. Se extiende a través de los concellos de Fornelos de Montes, Soutomaior, Pazos de Borbén, Redondela y llega a su fin en Vigo. El trayecto es lineal y de gran longitud (solo el tramo que corresponde con el municipio vigués es de 13 kilómetros), aunque su dificultad es baja y está recomendada para hacer con niños pequeños.

La duración aproximada es de cuatro horas y durante el paseo se pueden contemplar diversos riachuelos y el recorrido que traza el agua desde la presa de Eirás para abastecer la ciudad olívica. A lo largo del sendero encontrarás múltiples fuentes para refrescarte y bancos.

Ruta del Monte Aloia

Nos alejamos un poco más de Vigo para proponer una ruta que es todo un tesoro de la naturaleza. El Monte Aloia, ubicado en Tui, está declarado como Parque Natural desde el año 1978 y cuenta con un castro y miradores que ofrecen espectaculares vistas de la frontera entre Galicia y Portugal. Varias rutas de senderismos atraviesan el paisaje, como por ejemplo la PR-G 2, de 8,9 kilómetros de longitud y dificultad fácil. Su punto de partida es el refugio Miguel Regueira y recorre el Galiñeiro, Prado y el Monte Aloia, donde desemboca. La ruta dura unas tres horas y es apta para hacer en bicicleta.

La Vía Verde

La nueva Vía Verde de Vigo. Concello de Vigo.

Desde su inauguración oficial (e incluso antes), la Vía Verde se ha convertido en uno de los caminos más transitados por los vigueses. La ruta conecta el entorno de Vía Norte y el centro comercial Vialia con la estación de Chapela, por lo que reúne, por un lado, a quienes quieren acceder rápidamente al centro de Vigo desde Teis o Travesía, como a quienes tan solo desean disfrutar de un tranquilo paseo.

La Vía Verde se extiende 5,3 kilómetros y cuenta con carril bici y aceras para viandantes. Es un sendero recto con poca pendiente y cuenta con diversos puntos de descanso. Además, también dispone de un parque biosaludable para ejercitarse y muchos tramos ofrecen unas bonitas vistas a la ría de Vigo.

Ruta entre Punta de Couso y Monte do Facho

Por último, no puedes dejar de visitar el entorno mágico de Cabo Home, en O Morrazo, a un paso de Vigo y con uno de los mejores paisajes de la zona. En esta ocasión no recomendaremos la ruta de los Faros, muy conocida entre los vigueses, sino el recorrido entre la famosa estatua metálica de la caracola (Punta de Couso) y el monte do Facho.

Este camino se conoce como Costa da Vela. El sendero hasta el Facho de Donón es pedregoso y se va empinando a medida que nos acercamos a la cumbre, pero el esfuerzo valdrá la pena: en el punto más alto podréis encontrar los restos de un poblado castreño y un santuario galaico-romano del siglo III d. C. al aire libre dedicado al dios Berobreus. La ruta es lineal y se extiende tres kilómetros, que se recorren en un tiempo estimado de una hora.