El Consorcio Aeronáutico Gallego (CAG) celebró hoy su Asamblea General Ordinaria en su sede en Vigo, inaugurada por Francisco Conde, Vicepresidente Económico y Conselleiro de Economía, Empresa e Innovación de la Xunta de Galicia.

Durante la reunión, se abordó la situación actual del sector, así como las actividades realizadas en el último ejercicio y la previsión de nuevas acciones para el resto del año 2021.

La industria aeronáutica y aeroespacial ha sido una de las que mayor impacto ha sufrido de la Covid-19. Después de las caídas histórica en el tráfico aéreo a nivel mundial, que arrastraron la cartera de pedidos en 2020, el sector pudo vislumbrar en el año 2021 los primero síntomas de recuperación.

Enrique Mallón, presidente del CAG, destacó que "la aeronáutica y aeroespacial gallega mantuvo empleo en 2021 y cerró con un incremento de facturación del 6%, con 89 millones de euros. Es una industria que ha crecido de forma sólida desde los 300 trabajadores y 12 millones con los que se inició hace menos de una década. A pesar de que estamos en una tormenta perfecta de múltiples dificultades, confiamos en que el 2022 sea el año del despegue de la recuperación en esta industria. Tenemos esperanzas puestas en los fondos europeos de recuperación, en el Perte aeronáutico, y sobre todo en Galicia con las convocatorias del Polo Aeroespacial de Rozas".

El CAG agrupa ya 42 miembros, tanto empresas como centros tecnológicos y de conocimiento. En ese sentido, Mallón destacó que "Galicia tiene hoy una fuerte representatividad en esta industria a nivel nacional. Por aquí están pasando los grandes fabricantes en aviación comercial y no tripulados, fruto del esfuerzo público-privado realizado en los últimos años por parte del Consorcio Aeronáutico Gallego y de la propia Xunta de Galicia".

Desde el CAG ponen el foco inmediato en las convocatorias del Polo Aeronáutico de Rozas, en introducir más a las empresas gallegas en el avión de combate europeo FCAS, y en seguir posicionando a Galicia como polo aeroespacial a nivel nacional internacional. "En ese marco, se enmarca el Observatorio Aeroespacial Gallego lanzado por el CAG junto a la Xunta de Galicia, una colaboración muy relevante que va a impulsar múltiples estudios y la consolidación de esta industria y crear huella industrial", concluyó Enrique Mallón.

84 millones en Rozas

Francisco Conde, destacó en su intervención la importancia de este "sector emergente, en clara recuperación, con grandes oportunidades tanto en la construcción de estructuras como en el segmento de aviones no tripulados. Desde la Xunta seguimos apostando por la colaboración público-privada, estando cerca del sector y de las empresas. En ese sentido hemos puesto en marcha el convenio de colaboración con el CAG para lanzar el Observatorio Aeronáutico de Galicia; y seguimos impulsando el Polo Aeroespacial Gallego, que tiene actualmente 84 millones de euros en ejecución, que están permitiendo la continuidad de los 160 millones invertidos entre 2015-2020″.

Conde destacó que este Polo es "elemento vertebrador, con socios industriales de renombre que impulsan la i+d desde Rozas". "Contamos actualmente con 9 candidaturas y ya tenemos garantizada la continuidad de Boeing e Indra, que están desarrollando un simulador vinculado a la gestión de tráfico aéreo tripulado y no tripulado, que permitirán que Galicia siga siendo una referencia", añadió el titular de economía de la Xunta de Galicia.

Durante la Asamblea General, el CAG presentó la intensa labor que ha venido desarrollando en el último año para impulsar la industria aeronáutica y aeroespacial en Galicia.

Síntomas de recuperación

Las empresas del CAG hicieron hincapié en que se empiezan a constatar síntomas de recuperación y reactivación de pedidos, tanto en la aviación comercial, que aún sigue afectada por la covid-19, como también en otros nichos de mercado como los helicópteros, los drones, o los sistemas y soluciones tecnológicas.

Aun así, existe preocupación por la situación actual, marcada por la inestabilidad política internacional y los encarecimientos y dificultades de abastecimiento en energías y materias primas. En este contexto, las empresas del sector insistieron en que la formación será clave para afrontar la recuperación, debiendo centrarse en preparar el talento de las empresas para focalizarse en los procesos más que en los productos, para acometer así proyectos complejos de I+D+i y potenciar la competitividad de la industria aeronáutica gallega a nivel internacional.