La huelga de transportes continúa y la Policía Nacional se ha visto obligada, una jornada más, a escoltar a los camiones que salen del Puerto de Vigo y de los diferentes parques tecnológicos de la ciudad. Actualmente, aseguran desde la Comisaría de Vigo-Redondela, hay varias unidades en los puntos más conflictivos de la ciudad, en los que hay desplegados UIP (antidisturbios), UPR (seguridad ciudadana) y vehículos policiales.

A lo largo de los últimos días, desde que comenzó la huelga, se ha identificado a varias de las personas que se concentran o manifiestan en las entradas del Puerto y los PTL, "aunque no ha habido ningún incidente en la ciudad de Vigo". Por el momento, se prevé seguir escoltando a los transportistas "mientras la situación se mantenga", dice la policía.

Por su parte, Javier Touza, presidente de la Asociación de Cooperativas de Armadores de Vigo (Arvi), agradece el trabajo policial y admite que se tuvo que solicitar ayuda a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "ante la situación límite" que se estaba viviendo, que impedía garantizar el transporte de "productos frescos de gran calidad pero con periodos de caducidad muy cortos".

Por esta razón, con el fin de evitar "destruir grandes cantidades de pescado", se están organizando convoyes desde la lonja viguesa hacia plataformas como Mercamadrid o Mercabarna, "donde sí que se están viviendo más incidentes", dice Touza. "Consideramos que es una cuestión fundamental abastecer el mercado, además de que tenemos derecho a que se proteja la integridad física de nuestros transportistas, que es el objetivo primordial, además de garantizar el abastecimiento de la población".

Piden soluciones "negociadas y urgentes"

"Actualmente estamos asumiendo ciertos riesgos, pero entendemos que es una situación que requiere soluciones inmediatas", repite Touza, una petición que Arvi ya ha manifestado en varias ocasiones en los últimos diez días. "No podemos desarrollar nuestra actividad pesquera con normalidad porque hemos detectado sabotajes en puntos como Benavente, Madrid o Bailén", aqueja.

Asimismo, añade que esta huelga se ha solapado a una creciente subida del precio del gasoil "que mantiene amarrada a la flota de cerco y litoral", una situación que está "acelerando el proceso de parada de flotas" y que podría hacer peligrar la logística encargada de distribuir el pescado del Gran Sol. La flota gallega vive hoy su tercer día de amarre, a la espera de la reunión de esta tarde de representantes del sector con el ministro de Pesca, Luis Planas.

"Son muchas semanas de trabajo y de faena para después tener que destruir toda la materia prima: es una situación que no se puede mantener en el tiempo". Además del pescado fresco, el presidente de Arvi advierte que también se está viendo afectado el sector del pescado congelado, "porque no se puede suministrar materia prima y la industria está empezando a notarlo".

Por todo esto, se ha instado a las asociaciones pesqueras gallegas a "hacer presión" para que se produzca una reunión con la ministra de Transportes "para encontrar soluciones negociadas urgentes", afirma Touza. "Si no se acaba esta situación, lógicamente los problemas de abastecimiento irán in crescendo".