VIGO, 23 Sep. (EUROPA PRESS) –

La conselleria do Mar de la Xunta de Galicia, Rosa Quintana, ha pedido este viernes a la Comisión Europea que no gobierne teniendo "única y exclusivamente" en cuenta las presiones medioambientales. Así lo ha señalado Quintana tras ser preguntada por los medios de comunicación sobre si espera que la semana que viene Bruselas cambie de parecer sobre el veto a la pesca de fondo en 87 áreas, que afectará a gran parte de la flota gallega.

En este sentido, la titular de Mar ha pedido a la Comisión que "tome conciencia" de que tomó una decisión "desde el punto de vista equivocado", dañando a "todo el sector pesquero", no solo de España, sino de otros países como Francia o Irlanda.

"Creo que un buen comisario debe de tener en cuenta su propio reglamento de base. Ese reglamento de la Política Pesquera Común establece la necesidad de mantener un equilibrio de aspectos medioambientales, sociales y económicos", ha reivindicado Quintana. Por ello, ha cargado contra el comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius, diciendo que desde su llegada al puesto solo tiene en cuenta "situaciones medioambientales", olvidándose de la parte "social y económica".

Quintana ha pedido que no se puede olvidar que el sector pesquero produce alimentos, destacando la importancia de que la Unión Europea no puede depender de terceros países para obtener estos productos tan básicos para las personas. "Tenemos un sector muy importante en Europa que produce un alimento de una calidad extraordinaria con muy poca huella de carbono. Si tanto queremos luchar contra el cambio climático, ayudemos a esos sectores de actividades", ha reivindicado.

Además, la conselleira ha añadido que el reglamento de 2016 en el que se basa el comisario para tomar la decisión de vetar estas 87 áreas, también establece que se deben respetar las zonas en las que en ese año la flota ya trabajaba.

"Las medidas que va a adoptar deben de tener en cuenta ese detalle y no obligar a armadores que estaban trabajando en zonas permitidas, con aparatos permitidos a abandonar esas zonas e ir a pelearse con otros compañeros porque no cabrán todos en otras zonas", ha sentenciado Quintana.

Marea roja

En otro orden de cosas, y preguntada sobre las mareas rojas, ha indicado que se trata de un proceso natural "como consecuencia de las buenas condiciones de las rías gallegas". "Es un proceso natural, una explosión del fitoplancton que no se puede hacer nada para evitarlo. Hay que tener paciencia y esperar a que pase el episodio tóxico y después los productos vuelven a estar en completas garantías de calidad sanitaria", ha explicado.

Ante la posibilidad de abrir algunas zonas que en la actualidad están afectadas, Quintana ha subrayado que se hacen controles diarios. Según ha dicho, en este momento hay tres tipos de toxicidad diferentes, unas células han bajado y otras han subido. "Hasta que no existan ninguna de las células causantes de esas toxinas no se puede abrir", ha añadido.