Tan solo tres ciudades de Galicia sortean la contaminación por ozono, según arroja el último informe sobre esta sustancia contaminante en España, elaborado por la asociación Ecoloxistas en Acción. Las mediciones revelan que la práctica totalidad del territorio gallego incumple con los estándares recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), excepto Vigo, Pontevedra y Lugo.

¿Pero qué es el ozono? Es un gas que está de forma natural en la atmósfera en bajas concentraciones, pero tal y como explican desde Ecoloxistas en Acción, puede ser un contaminante "muy complejo", ya que no tiene "una fuente humana directa, sino que se forma en la superficie terrestre en presencia de radiación solar por la combinación de otros contaminantes denominados precursores".

Es decir, el ozono se vuelve contaminante cuando entra en contacto con otros factores; en el caso de Galicia, los más comunes son el transporte y la maquinaria, la ganadería intensiva, los fuegos rurales, el uso de disolventes y la combustión no industrial. Además, su efecto contaminante se intensifica durante la primavera y el verano y repercute directamente en la calidad del aire.

Una exposición continuada a aire contaminado por ozono se traduce en perjuicios para la salud humana, problemas en la vegetación y bajo rendimiento de los cultivos. Como expone Ecoloxistas en Acción, la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) y la OMS cifraban en el año 2020 hasta 300.000 muertes prematuras en países europeos por la mala calidad del aire; 24.000 de ellas en España.

Resultados en Galicia

El estudio realizado por Ecoloxistas en Acción señala cómo solo Vigo, Pontevedra, Lugo y sus respectivas áreas urbanas muestran unos niveles de ozono por debajo de los valores de contaminación dictaminados por la OMS.

La explicación que puede tener que una ciudad tan poblada como la olívica se libre de estos efectos es la particularidad de la química del ozono: se acumula a cierta distancia de las fuentes de sus contaminantes precursores (como la ganadería), por lo que "afecta mucho más a las zonas rurales y periurbanas". Asimismo, el aumento del calor como consecuencia del cambio climático refuerza el incremento de este gas contaminante.

El informe de la organización ecologista apunta que en el caso de Galicia la formación del ozono es "moderada" en comparación con otros territorios de la Península Ibérica. Durante el 2023 se ha registrado "el menor número de superaciones de la recomendación de la OMS de la última década" (con excepción de los dos años de pandemia, 2020 y 2021), aunque teniendo en cuenta el valor diario recomendado, toda la población gallega se ha visto expuesta a aire contaminado por ozono.

Frente a esto, Lugo, Pontevedra y Vigo se mantuvieron por debajo de los tres días de superación del valor recomendado por la OMS. Comparado con el año 2012, Lugo ha descendido un 73% sus niveles de ozono; Pontevedra, un 92% y Vigo, un 84%.

Además, desde Ecologistas en Acción resaltan que solo las ciudades de A Coruña y Pontevedra han puesto en marcha las Zonas de Bajas Emisiones y apremia al resto de municipios de más de 50.000 habitantes a implementarlas, como exige el artículo 14 de la Ley estatal de cambio climático y transición energética.