El pan es un elemento básico en todas las dietas europeas y esencial para una buena alimentación, siendo un alimento que, se encuentra a diario en las casas de la mayoría de los vigueses. Para proteger los intereses de los profesionales que se dedican al sector surge la Asociación Provincial de Industriales y Artesanos de Panificación y Pastelería de Pontevedra (Aproinppa).
Desde su nacimiento en 1977, Aproinppa integra a numerosos negocios de la provincia. Actualmente, el colectivo está conformado por 10.000 personas pertenecientes a 350 empresas.
El presidente de Aproinppa, Francisco Sánchez Bergantiños, explica que el actualmente colectivo tiene "tres pilares fundamentales" que justifican su línea de actuación: actividades de formación, negociación sindical y servicios de asesoría y gestoría para las empresas asociadas.
Entre estas actividades, Francisco Sánchez recalca la importancia de que la asociación tenga el poder para negociar el Convenio Colectivo del sector cada año. Ya que con esto ayudan a mejorar las condiciones de todas las empresas y trabajadores de la provincia de Pontevedra, "somos la única entidad que tiene legitimidad normativa para negociar el convenio", explica el presidente.
En cuanto a las labores de gestoría y asesoría, Aproinppa ofrece estos servicios a todas las empresas asociadas que así lo deseen. Actualmente, alrededor de 90 empresas confían en la asociación para el manejo de la contabilidad y la liquidación de impuestos, entre otros trámites, cuenta Francisco Sánchez.
Generando valor añadido a través de la educación
La Escuela de Técnicos en Panificación de la Comunidad Autónoma de Galicia es uno de los pilares fundamentales de Aproinppa. Su aparición en 1989 fue pionera en el sector, ya que solo existían otras tres escuelas de este tipo en toda España. "La escuela es uno de los pilares fundamentales de la asociación, le da valor añadido", comenta el presidente de Aproinppa.
Desde la Escuela imparten numerosos cursos tanto de panadería como de pastelería para formar a personas interesadas en el sector. Francisco Sánchez explica que entre la oferta educativa se pueden diferenciar tres tipos de cursos dedicados a distintos públicos.
"Los cursos de pocas horas son los más simples", y por tanto suele apuntarse gente que tienen interés, aunque no se dedique al sector, explica el presidente de Aproinppa. Francisco Sánchez asegura que cada vez hay más gente interesada en la pastelería y la elaboración del pan, lo que se ve reflejado en la demanda de este tipo de cursos.
Desde la Escuela también ofertan cursos más largos, para aquellas personas que quieran formarse para trabajar en el sector. Y, por último, Sánchez Bergantiños, comenta que "los cursos que más interesan a los asociados", son aquellos de especialización donde se necesita de conocimiento previo de la materia. Para estos cursos la asociación intenta traer a profesionales de prestigio nacional para impartir "masterclasses".
Para la impartición de los cursos, así como de las labores de gestoría y asesoría, Aproinppa cuenta con un amplio local en el centro de Vigo. Entre sus instalaciones destaca una sala de juntas con capacidad para 200 personas, aulas teóricas y aulas prácticas totalmente equipadas.
Una profesión sacrificada
El de la panadería es un sector relativamente estable en relación al volumen de trabajo que se demanda año tras año, contando con un nivel de ventas relativamente estable. En palabras del presidente de Aproinppa: "no es un sector de crecimiento explosivo, por lo que no sufre grandes baches".
Por estos motivos, hay una importante demanda de este tipo de profesionales, necesarios en muchos negocios. Francisco Sánchez, achaca esta falta de personal a las condiciones exigentes del sector, "los horarios son complicados, no solo por trabajar de noche sino sobre todo los domingos y festivos", razona.
Problemas fruto del encarecimiento de los recursos
La escalada de los precios del gas, los combustibles y el precio de la harina están suponiendo grandes problemas en el sector, que ven que sus beneficios disminuyen a la vez que los precios aumentan. Además, Sánchez Bergantiños explica que para las panaderías no es posible aumentar el precio de sus productos para paliar la subida si quieren seguir siendo competitivos.
"En nuestro sector es imposible transmitir los precios a la subida, porque hay múltiples ofertantes", explican desde la asociación. Es por esto que miran preocupados al futuro ya que "nadie vislumbra el fin de la escalada".
Francisco Sánchez añade que preocupación también aumenta debido a que "los consumidores comienzan a estar tensionados", lo que les está afectando a la capacidad de compra.