La única cafetería 100% sin gluten en Vigo se llama Anaquiño

A pocos minutos caminando desde el Parque de Castrelos, en la Avenida del Alcalde Portanet, se encuentra Anaquiño, la única cafetería en Vigo que solo oferta productos sin gluten.

Hace poco menos de un año, la propietaria, Paula Fernández Gallego, se decidió a abrir el negocio motivada por su situación personal. Ella misma es celíaca y se encontraba con muchas dificultades para desayunar o comer fuera de casa. "No encontraba opciones más allá de tomarme un café, porque ni siquiera Nesquik había muchas veces", explica Paula.

Así que, después de pensar mucho en el proyecto finalmente se decidió a buscar locales, y cuando encontró el local actual de Anaquiño, Paula comenta que se dijo "es ahora o nunca".

Local 100% gluten free

En Anaquiño se puede encontrar una amplia oferta culinaria, pero eso sí, totalmente sin gluten. La propietaria explica que esto se debe a tres razones principales, "primero para eliminar la contaminación cruzada, te curas en salud y es mejor prevenir; luego porque en la mayoría de los platos no se nota la diferencia de sabor, y, por último, porque el resto de gente puede comer en cualquier sitio, los celíacos no.

Con este proyecto, Paula pretende que las personas celíacas tengan un lugar en la ciudad al que puedan ir para comer o desayunar sin tener que preocuparse por si va a haber alimentos adaptados a sus necesidades o si estos van a sufrir contaminación cruzada.

Riquísimos desayunos y meriendas

El establecimiento se promociona como un local especializado en desayunos y meriendas, aunque también ofrece opciones para comidas y cenas.

Las opciones de pastelería en Anaquiño son infinitas, lo cual resulta insólito tratándose de alimentos sin gluten: gofres, galletas, brownie, cheesecake, carrot cake, selva negra, tarta de la abuela, bizcocho,…

Además, también oferta opciones de panadería como empanadas y empanadillas, pizzas, quiché, pionono, y… ¡pan!. Todos los días Paula hornea por la mañana pan para vender al mediodía, ya que no trabajan de noche, y recomienda reservar ya que no cuenta con un horno industrial, por lo que no puede producir en grandes cantidades.

También es importante reservar cuando se quiere una tarta o un producto en particular, de esta forma aseguras su disponibilidad. Aunque Paula destaca que dentro de la carta hay productos como los bocadillos o las hamburguesas que los tienen siempre.

Pasito a pasito con mucho trabajo

Actualmente, Paula es la única persona que trabaja en la cafetería, por lo que se encarga tanto de la cocina como de servir. "Tuve que reducir el horario porque no me daba la vida", explica la propietaria, que asegura que está en proceso de contratar personal para poder ampliar las horas de apertura.

Pero, por ahora, ella es la única que se encarga de preparar todos los dulces, los platos y el pan que se oferta en el restaurante, todo preparado allí para garantizar la ausencia de gluten.

Este volumen de trabajo, en ocasiones insostenible, hace que muchas veces tenga que pedir ayuda a su familia. Así ocurrió las noches de Nochebuena y Fin de Año, cuando "no nos pudimos acostar por los encargos que teníamos para las comidas, nos quedamos trabajando toda la noche", explica Paula.

Sin embargo, afirma que esta no es una solución definitiva ya que su familia es de Ourense y vive allí, por eso normalmente está completamente sola a la hora de servir y cocinar.

Pese a estas dificultades, Paula se muestra alegre y optimista con el proyecto que, comenta, ha tenido muy buena acogida en la ciudad. "No me puedo quejar, la verdad es que para llevar menos de un año me va muy bien", dice ilusionada la propietaria.