La correduría gallega Artai ha sido adquirida en su totalidad por el bróker londinense de seguros Howden Broking Group a través de su firma local Howden Iberia. La compañía inglesa entra así en territorio gallego, en el que no contaba con presencia aún, y continúa con su modelo de crecimiento en España a través de empresas locales con amplia experiencia.
Artai, con más de 25 años de trayectoria, 17 oficinas propias en toda España y dos en Marruecos, pierde así su reconocida marca para integrarse en la firma internacional perteneciente a Howden Group Holdings.
Howden, que llegó a España en 1999, cuenta en la actualidad con 370 trabajadores y 15 oficinas en territorio español, y fue en 2006 cuando Howden Iberia obtuvo la licencia como corredor de seguros en el país. “Howden Iberia comenzó su andadura en el sector asegurador español como un pequeño proyecto que año tras año fue consolidando su posición en el mercado, a base de esfuerzo y compromiso. El cumplimiento de los objetivos fijados en los sucesivos planes estratégicos permitió conformar una personalidad propia como empresa”, señala la firma de matriz londinense.
La venta ya se vislumbraba y comentaba en el sector desde hacía meses. En diciembre de 2020, y tras la compra por parte de la firma inglesa de la correduría gaditana Arroyal Cantera, la edición andaluza de un diario nacional ya se hacía eco de la integración también de la compañía viguesa. "La filial española de esta multinacional inglesa es de unos 380 trabajadores, cifra que podría incrementarse hasta los 500 cuando se cierre la operación de Artai", informaba ABC Sevilla a finales del pasado año.
Adiós a la marca gallega
Una de las consecuencias de las adquisiciones empresariales es la pérdida de las históricas marcas locales sobradamente conocidas por los ciudadanos de las urbes que las vieron nacer. Es el caso de Artai en la ciudad olívica, que inicia su andadura en 1993 y se convierte en una importante firma independiente en el sector.
Como ellos mismos definen "Artai nace en Galicia en 1993 de la mano de un grupo de profesionales del sector asegurador como una compañía privada e independiente, especializada en el servicio de empresas de los sectores marítimo-pesquero, de la madera y de automoción. Aspirábamos a convertirnos en una compañía de referencia en el sector en España", reza su página web.
Y así fue. Ahora, se despide una reconocida y querida marca gallega pero queda el resultado de una larga trayectoria en el sector, cuyo buen hacer despertó el interés de un pez mayor.
La era de los fondos
Grandes operaciones de compra realizadas por fondos internacionales ya no son una novedad en el territorio nacional. Algunos expertos aseguran que el poder ya no es de los bancos, sino de estos gigantes inversores que se hacen con el talento y el buen hacer de compañías y marcas históricas cuya actividad funciona, con una cartera de clientes estable y en la que gran parte del trabajo de desarrollo empresarial ya está hecho.
La contrapartida suele ser una importante inversión que colabora en el crecimiento y otorga prosperidad a la empresa en cuestión. Y una de las claves, los cambios en el "espíritu" de la compañía, que en mayor o menor medida suele adoptar los valores de la empresa matriz, y en los equipos de trabajo, que muchas veces tiemblan con la llegada de los nuevos inversores -que con frecuencia toman posiciones en los puestos de mayor responsabilidad y tratan de evitar duplicidades con sus estructuras-.