VIGO, 13 Dic. (EUROPA PRESS) –
La planta de Stellantis en Vigo ha aprobado, con el apoyo de los sindicatos SIT-FSI, UGT y CC.OO., que suman mayoría en el comité de empresa, un expediente de regulación de empleo temporal (ERTE) por causas organizativas y de producción, ante la falta de piezas que afecta a la industria de automoción.
Tal y como han informado fuentes conocedoras de la negociación, las jornadas de ERTE se podrán establecer entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2022 y durante 60 días laborales, ampliables en 15 días más, para cada trabajador indefinido.
El expediente se aplicará una vez agotada la adecuación de jornada, el día de permiso de convenio y el saldo disponible en la ‘bolsa de horas’. También se podrá acceder a esta medida una vez consumidas 20 jornadas de inactividad.
Además, la empresa procurará que se realice actividad complementaria para compensar jornadas de no producción y abonará un complemento hasta el 80% del salario convenio y complemento individual y de la parte proporcional de pagas extras sin afectar a la generación de vacaciones ni la retribución variable.
Asimismo, los trabajadores generarán, por cada 20 días de ERTE, una jornada de formación voluntaria presencial retribuida con el 100% del salario o de autoformación a integrar en bolsa individual. En el caso de los trabajadores indefinidos a jornada completa, se incluyen 60 retiradas de cláusula de variabilidad.
Para los trabajadores indefinidos a tiempo parcial, que se incluyen en el ERTE como novedad, se establece una ‘bolsa de horas’ con una remuneración de entre 120 y 155 horas al mes para los turnos de día, de 100 a 145 horas mensuales para el equipo de noche, y de 80 a 96 horas para el cuarto turno. También se articulan 60 novaciones a tiempo completo con cláusula de variabilidad para los contratos indefinidos a jornada parcial.
Adicionalmente, se fijan medidas de acompañamiento para los empleados con contratos temporales, a los que no les será de aplicación el ERTE. Así, contarán con un pago mínimo de 80 horas al mes, con compensación de las no trabajadas a partir de este rango. Además, si durante dos meses fuese necesario activar la garantía, la realización de entre 80 y 90 horas se remuneraría en su integridad y por encima de esa cifra se compensarían saldos deudores.
Valoración de los sindicatos
SIT-FSI, el sindicato mayoritario, ha decidido dar el visto bueno a la propuesta final de la empresa, trasladada el pasado jueves. En concreto, ha adoptado esta decisión tras tener en cuenta "la incertidumbre existente de cara al año 2022" y la recogida de "la mayor parte" de las solicitudes realizadas a la propuesta de la empresa, así como "su última aportación en cuanto a compromiso en materia de empleo" pedido por SIT-FSI.
Por su parte, UGT ha valorado que el ERTE "dé protección a todos los trabajadores con contrato indefinido" y "un mínimo de cobertura" a los eventuales, la voluntariedad de la realización de sábados y que la bolsa de horas establecida para los turnos de noche y fin de semana cuente con "umbrales de funcionamiento semejantes al de los de la bolsa de día". Así, ha celebrado la incorporación de estas consideraciones, que "se marcaron como fundamentales" en la asamblea del sindicato.
Mientras, CCOO ha aceptado la medida debido a "la consecución de la inclusión de los contratos a tiempo parcial por primera vez en un expediente por razones organizativas y productivas". Aunque ha lamentado que se establezca la obligatoriedad de gastar 20 días de la bolsa plurianual, ha considerado que este "peaje" supone "un mal menor" para poder dar cobertura a los trabajadores a tiempo parcial.
Rechazo de CUT y CIG
CUT se ha opuesto a la medida, de acuerdo con el resultado de la votación de una asamblea celebrada este sábado y abierta a todos los trabajadores, al considerar que "únicamente beneficia a la empresa".
Así, este sindicato ha denunciado que "con la justificación de incluir a los contratos a tiempo parcial en este ERTE", la dirección de la planta "consigue que se acepte la ‘bolsa de horas’ para este colectivo". Además, CUT ha criticado que no se regulen los preavisos para la suspensión de la actividad y que la dirección "se niegue a reducir la carga de trabajo para minimizar el impacto de las medidas solicitadas".
CIG también ha rechazado firmar el ERTE y ha acusado a la empresa de "actuar de mala fe" y pretender "cargar" sobre los trabajadores a tiempo parcial una bolsa de horas "‘sine die'". Del mismo modo, ha acusado a la dirección de la planta de "utilizar la medida del ERTE" en lugar de "reducir las cargas de trabajo y reestructurar turnos".
Así las cosas, ha concluido que "no cabe obligar a los trabajadores a entrar en un saldo de bolsa de horas negativo por falta de actividad" para, posteriormente, "abocar a gran parte de la plantilla a trabajar los sábados por no cubrirse el equipo".