La sede de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP) ha sido hoy centro de un encuentro protagonizado por mujeres en el que se ha debatido sobre uno de los retos que aún tiene por delante el tejido empresarial de la comunidad gallega: la igualdad de género.
Si bien, las mujeres han logrado en España una importante integración en el ámbito laboral en prácticamente todos los sectores, las pontes han compartido la idea de que conforme se asciende en los organigramas empresariales, van desapareciendo poco a poco de la pirámide. Algo que según han destacado varias de las participanetes, las empresas no se pueden permitir.
"El 50% de la población no tiene muchas veces la oportunidad de llegar a puestos directivos, no es culpa de las empresas, se trata de sesgos sociales y culturales que hay que superar. Es importante que pymes y autónomos se feminicen para lograr integrar todo ese talento, y hay que ayudar a las empresas a hacerlo", señaló durante su intervención Celia Ferrero Romero, vicepresidenta de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), quien abrió el foro de debate junto a la presidenta de la Comisión Igualdad de la CEP, Blanca Ana García Rodríguez, la delegada Territorial Xunta en Vigo, Marta Fernández-Tapias, y el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, quien participó de forma telemática.
"Parece mentira que la igualdad sea un reto y no una realidad en 2022", aseguró Garamendi. Quien abogó por minimizar la brecha de género, algo imprescindible para las compañías, que deben trabajar en esa línea. "Nuestra economía requiere de talento para el desarrollo pleno y no se puede prescindir de ningún talento en toda su diversidad, y en este caso que nos ocupa hoy, de talento femenino", apuntó.
Mujeres en las STEM, el gran reto del sector
La formación ha sido otro de los temas clave de la jornada, en los que el trabajo desde la infancia para que niñas y niños tenga claro que pueden ser lo que quieran ser es otro de los grandes trabajos que se deben realizar, en este caso, desde las propias familias y centros escolares. En este sentido, varias de las ponentes han manifestado que también aquí hay trabajo que hacer, pues los sesgos culturales se encuentran fuertemente arraigados, tanto que muchas veces la propia sociedad no es consciente de ello.
En el caso de la elección de la trayectoria profesional y la falta de mujeres en determinados ámbitos formativos, como las carreras STEM, algo que repercute inevitablemente en el tejido empresarial, las protagonistas de la jornada han sido Ana Bernabeu Tello, directora del Área de Investigación de la UVigo y presidenta de la Comisión de Igualdad del CIM, Mar González-Franco, investigadora en el campo de la realidad virtual de Google, que participó desde Estados Unidos de manera virtual y Ana María Paul Tomillo, directora de Innovación Tecnológica del CTAG, una mesa que estuvo moderada por la Directora de área de Servicios de la Axencia Galega de Innovación (GAIN).
"Hay una importante falta de referentes femeninas, sobre todo en algunos sectores, una invisibilidad", explicó Ana Bernabeu. "Seguimos teniendo los mismos patrones, se les lanza a las niñas una lluvia fina de mensajes de que no pueden, de que son diferentes o peores, que luego es algo difícil de superar", añadió.
En este sentido, la necesidad de tejer, entre todos, una red que permita visibilizar el talento femenino y contar con ‘sponsors’ que permitan a ese talento crecer fue otro de los asuntos mencionados durante las ponencias. "Ser inclusivo no se trata solo de algo que hay que hacer con las mujeres, sino con todas las realidades. Una realidad que no es diversa reduce las posibilidades de la gente de sentirse cómoda y parte del grupo, algo que resulta fundamental", explicó Mar González-Franco.
La autolimitación: otro freno
La segunda mesa de la jornada, denominada ‘Talento empresarial con M de mujer’ y moderada por María Camino, directora de Capital Humano de Abanca, estuvo protagonizada por varias directivas con una característica común y que todas mencionaron: la falta del miedo al cambio y a la toma de decisiones. Los temores y la autolimitación de las propias mujeres es un tema común en los debates de igualdad, ya que la cultura que aún se arrastra en muchos aspectos de la sociedad, y también en el ámbito empresarial, hace a las mujeres dudar en demasía de ellas mismas.
La CEO de Roberto Verino, Dora Casal, explicó cómo una red familiar en consonancia con sus inquietudes le ha servido para poder abordar determinados proyectos. "La conciliación no es fácil y desde nuestra compañía intentamos que no sea algo generalista sino abordar las realidades de cada persona", apuntó la directiva.
También Ana Alonso, vicedirectora general de CITIC HIC Gándara Censa y,Marta Costas Iglesias, subdirectora de asesoría jurídica y cumplimiento del Grupo Nueva Pescanova hicieron hincapié en la necesidad de no tener miedo al cambio. Costas señaló además la importancia de la "culpabilidad cero" a la hora de acometer retos profesionales y limitar la autoexigencia. "Es importante pararse a pensar estas cosas, ¿por qué tener un nivel de exigencia que no te están pidiendo?", destacó. La directiva concluyó con la idea de que la diversidad no solo es una cuestión de imagen o de talento, sino de negocio. Esto tienen que grabárselo a fuego las empresas".
Responsabilidad corporativa
Otra de las claves de la jornada fue la de la responsabilidad que las propias compañías, así como las mujeres que han logrado posiciones de poder, tienen a la hora de acometer este desafío. "Los sesgos inconscientes son una realidad. Nosotros hemos llevado a cabo una formación específica para los managers sobre esto", apuntó la responsable de Relaciones Sociales y Responsabilidad Social Corporativa para España y Portugal de Stellantis, Sonia Fernández Barciela, quien con una trayectoria amplia en el grupo de automoción y decisiones que en su momento fueron puntera aseguró que "incorporar a mujeres en los equipos mejora el clima social, el orgullo y la motivación".
La vicepresidenta de EL ESPAÑOL, Cruz Sánchez de Lara, que participó también en el foro por vía telemática, aseguró que las empresas son importantes motores del cambio social que tienen que dar visibilidad a sus mujeres así como a las iniciativas y las buenas prácticas que se están llevando a cabo. "También las mujeres que llegan a los puestos de toma de decisiones tenemos esa responsabilidad, hacer que las mujeres brillen", aseguró la directiva.
La última mesa de la jornada, moderada por la Secretaria General de CC.OO. Galicia, Amelia Pérez y en la que los sectores masculinizados históricamente como la automoción o el fútbol tuvieron un peso importante, la directora corporativa del RC Celta de Vigo, María José Herbón, aportó la visión más optimista. "Algo ya está cambiando", sentenció la directiva, que aseguró que educar en libertad y que las niñas crean que no tienen ninguna limitación por ser mujer resulta fundamental. "Hay que construir referentes y darles visibilidad, pero mi visión es positiva".
Reconocimiento a Abanca
Tras las mesas redondas tuvo lugar la entrega de un reconocimiento a Abanca como entidad impulsora de un cambio interno en su propia organización, e inspirador para las entidades públicas y privadas gallegas. Además, tuvo palabras de elogio por el respaldo al tejido empresarial de Galicia y, en general, para toda la ciudadanía, ya que, desde su punto de vista, "existe una simbiosis incuestionable entre la sociedad y las instituciones que la conforman".
El Presidente de la CEP, Jorge Cebreiros, agradeció el liderazgo de la entidad y alabó la labor trascendente de su Presidente, Juan Carlos Escotet, a quien se le entregó la obra de arte A súa forza, pintura del artista Jorge Trigo, integrante además del Consejo Asesor de la CEP, en representación de Ceamsa.
La clausura del acto corrió a cargo de la conselleira de Promoción del Empleo e Igualdad, María Jesús Lorenzana, quien aseguró que "la perspectiva de género en el ámbito laboral es imprescindible para conseguir un óptimo desarrollo como sociedad a todos los niveles; por eso, la equiparación salarial y la eliminación de las discriminaciones laborales por razón de género marcan la agenda de trabajo de la Xunta de Galicia".
Lorenzana recordó que en una situación económica compleja es recomendable poner el foco en las experiencias positivas y de probada eficacia. "Las Administraciones públicas y, por supuesto, la Xunta de Galicia también tenemos mucho que aportar en este objetivo colectivo", remarcó al tiempo que incidió en la necesidad de seguir trabajando contra la brecha salarial, los techos de cristal y la conciliación.