Tras varios meses de negociación, este mediodía se ha consumado la adquisición de Fandicosta por parte de la multinacional viguesa Wofco, fundada en 2016.
A pesar de que por el momento no han trascendido datos oficiales de la compra, fuentes conocedoras de la operación han confirmado a Treintayseis que la firma se ha llevado a cabo este mediodía, alrededor de las 15:30 horas.
Los bancos acreedores de Fandicosta habían validado ya en el mes de febrero el plan de compra presentado por Wofco, que asume el resto de la deuda (en torno a los 20 millones de euros), y la pesquera gallega tuvo que reestructurar la deuda para que la venta se pudiese cerrar.
Además, la Xunta de Galicia, poseedora del 12,1% de la compañía, renunció a principios de año a la recompra de las acciones que disponía a cambio de un compromiso para el mantenimiento del empleo. De hecho, Wofco asume las instalaciones de Domaio (Moaña) y el 90 % de la plantilla que trabaja en producción, de un total de 214 trabajadores.
En un comunicado remitido a los medios, la conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, ha destacado el papel desempeñado por la Oficina Económica del Igape a lo largo del proceso de venta para asegurar el mantenimiento de la actividad productiva y del empleo en la planta de Moaña.
Reacciones de los sindicatos
En declaraciones a Europa Press, el sindicato CC.OO. ha señalado que insistirán en reunirse con la nueva propietaria "para conocer de primera mano los proyectos presentes y de futuro que el grupo Wofco tiene para la nueva compañía".
"Agradecemos el esfuerzo de todas las partes, administración, comprador, vendedor y, especialmente, de las personas trabajadoras que han conseguido superar el pre-concurso y que se ejecute la venta con éxito, cumpliendo en todo momento con los pedidos de los clientes, manteniendo el nivel de compromiso y calidad", ha señalado la central.
Desde UGT también se ha puesto en valor "el trabajo conjunto de todas las partes implicadas" como "fórmula de éxito" para sacar adelante una situación "muy complicada", como la que había en Fandicosta.
"Hicimos lo que se esperaba de nosotros para dar continuidad en el empleo a las personas trabajadoras de una importante empresa del sector mar-industria", han subrayado, y han defendido que "éste es el camino a seguir" para defender la industria gallega, "con una administración gallega implicada y con una clase empresarial, en este caso Wofco, dispuesta a apostar por seguir invirtiendo y generando valor en la comarca".
Igualmente, la CIG ha celebrado que la venta es el cierre de un proceso que "acaba bien" porque no se pierde empleo y se mantiene la actividad de la empresa. Con todo, insiste el sindicato nacionalista, aunque "parece un proyecto solvente", es importante que los representantes de los trabajadores puedan reunirse pronto con los nuevos propietarios para "conocer sus planes de futuro".