PONTEVEDRA, 19 Ene. (EUROPA PRESS) –
La concejala de Protección Ciudadana del Ayuntamiento de Pontevedra, Eva Vilaverde, ha anunciado este martes que la Policía Local aumentará el rigor en la vigilancia para que bicicletas y patinetes eléctricos circulen por las calzadas.
Así, ha subrayado que las sanciones por incumplir esta norma son de 200 euros, pero que podrían agravarse hasta los 500 euros.
La edil nacionalista ha recordado en rueda de prensa que con la entrada en vigor de la Ordenanza de Movilidad Amable el pasado mes de octubre y de la nueva normativa estatal el pasado 2 de enero, las bicicletas y vehículos de movilidad personal (VMP) deben circular, con carácter general, por la calzada y respetando las velocidades y los sentidos de circulación.
Asimismo, tienen prohibida la circulación por aceras y demás zonas reservadas a uso exclusivamente peatonal, como pasos de cebra, paseos o parques. En las zonas de coexistencia podrán circular, pero siempre con respeto a la velocidad de las personas y sin causar ningún peligro.
Con el objeto de vigilar el cumplimiento de estas normas, la Policía Local "aumentará el rigor y cuidará expresamente que se cumplan las novedades punitivas", ha asegurado Eva Vilaverde, quien ha advertido de que esta vigilancia se activa "desde ya" y con el objetivo "de consolidar" la nueva normativa.
La concejala recordó que la Ordenanza municipal se aprobó "con la idea de mejorar la movilidad de las personas y de conseguir una calles más ordenadas y seguras". Esto significa que "a partir de ahora se aumentará el rigor en la vigilancia para garantizar la perfecta convivencia entre personas y vehículos, en este caso bicicletas y VMP".
En este sentido, aseguró que, tras la fase de divulgación informativa y didáctica llevada a cabo por su Concejalía y tras dejar pasar la Navidad, se busca que "el vecindario y las personas usuarias de estos vehículos sean conscientes de esta nueva situación".
Solo tres multas el año pasado
Eva Vilaverde explicó que, durante el pasado año y antes de la entrada en vigor de la noticia normativa, tan sólo impusieron multas a bicicletas y VMP en tres "situaciones flagrantes".
La primera sanción corresponde a una bicicleta que se saltó un semáforo en rojo, la segunda a una bicicleta que circulaba por la acera en Eduardo Pondal en el mes de mayo, y la tercera a un VMP por dar positivo en alcoholemia en la plaza de la Verdura en octubre.
En los dos primeros casos, las personas infractoras fueron multadas con 200 euros y en el tercero con 1.000 euros.
Por último, Eva Vilaverde ha dicho que la aplicación de la ordenanza municipal "es un escalón más en la consolidación de los estándares de seguridad y calidad de vida y en la calidad urbana en la ciudad".