El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, avanzó hoy el salto de calidad que supondrá la nueva equipación puntera del Hospital Gran Montecelo, que evitará que los cerca de 500 pacientes del área se desplacen a Vigo para recibir Radioterapia, pues ya podrán obtener su tratamiento en Pontevedra.
"Esos 500 pacientes serán la punta de lanza de todas esas mejoras que va a haber aquí y que van a suponer consolidar servicios médicos que eviten desplazamientos y, por lo tanto, aumenten la calidad", afirmó.
La equipación de vanguardia con el que contará esta infraestructura recibirá otro impulso con la inversión de 8,8 millones de euros para equipar los nuevos servicios de Radioterapia, de Medicina Nuclear, de Radiodiagnóstico y de Hemodinámica que se instalarán en el futuro hospital.
Rueda hizo estas declaraciones durante la visita que realizó a las obras de remodelación y ampliación del Hospital Público Gran Montecelo. Destacó que el buen ritmo de las obras da paso a la construcción de la nueva torre de hospitalización en forma de Z. "Estamos construyendo instalaciones que hacen falta ahora pero que van a dejar resueltas las necesidades de espacios e instalaciones hospitalarias de Pontevedra, de 300.000 habitantes de 26 ayuntamientos para los próximos 50 años", destacó.
Hospital Gran Montecelo
En estos trabajos se van a invertir 154 millones de euros y lo convertirán en la "punta de lanza de la sanidad pontevedresa", según dijo. Implicará un 74% más de superficie; dos nuevos edificios y un bloque de hospitalización; 120 camas, 53 consultas y 3 quirófanos más; y un incremento del 49% en los puestos de hospital de día y del 92% en los puestos de Urgencias.
Después de trece meses de trabajos, realizados en los plazos previstos a pesar de la crisis de materiales y el paro del transporte, la ejecución del Gran Montecelo atraviesa una fase trascendental que modificará la estructura del complejo hasta convertirlo en un inmueble reconocido y reconocible por los pontevedreses, los trabajadores y los usuarios.
En este sentido, para que se vayan familiarizando con él, a partir de 1 de julio y durante las tardes de los viernes, se programarán visitas guiadas para los sanitarios y, ya en septiembre, será el turno de los colectivos sociales de Pontevedra.
Además, Rueda reiteró que la falta de médicos no es una cuestión económica porque si lo fuese el problema ya estaría resuelto, y recordó que hoy la Xunta invierte en servicios de salud 800 millones de euros más cada año que en 2009, y de ellos unos 350 se dedican a gasto en personal. En este sentido, instó, de nuevo, al Gobierno central a que asuma su responsabilidad para resolver un problema que afecta a toda España.
El presidente gallego finalizó afirmando que el Gran Montecelo obedece al deseo de esforzarse continuamente para prestar un mejor servicio a los ciudadanos de la Comunidad, y aseguró que no será la última obra sanitaria que se va a realizar, porque siempre habrá proyectos que emprender y servicios que modernizar, pero desde una valoración precisa de lo que ya tenemos.