Un hombre de 28 años ha sido detenido por la Policía Local de Pontevedra por, presuntamente, agredir a su expareja, de 23, en el interior de una vivienda. La colaboración ciudadana, concretamente, de un grupo de asistentes a una concentración en favor del pueblo palestino, permitió -este pasado lunes- denunciar la supuesta agresión.

Así, los manifestantes escucharon cómo desde un piso de la ciudad una mujer pedía auxilio y socorro. Tras la advertencia de los ciudadanos, los agentes pudieron entrar al citado domicilio a las 20:15 horas de la tarde. Allí comprobaron que todo estaba revuelto y, además, que había cristales rotos.

Tal y como recoge el parte policial, se produjo una discusión acalorada entre la expareja y, en el medio de la misma, la víctima, que presentaba varias heridas en el cuello, llegó a ser suspendida en el aire. Los policías comprobaron que tenía otras lesiones de agresiones anteriores.

El departamento de seguridad, dirigido por Eva Vilaverde, agradeció la colaboración ciudadana y la calificó como "fundamental" para tratar de erradicar la violencia machista.