Pontevedra ‘tranquiliza’ a la ciudadanía tras anunciar la señalización de las ZBE
El concejal de Movilidad, César Mosquera, explica que la instalación de las señales no supondrá cambios en la práctica para los conductores
20 diciembre, 2023 10:41El edil de Movilidad del Concello de Pontevedra, César Mosquera, presentaba hace una semana las señales que identificarán el área urbana como Zona de Bajas Emisiones (ZBE) tras recibir la aprobación por parte de la Dirección General de Tráfico (DGT). Su instalación es obligatoria, pero según explicaba el concejal, esto no supondrá cambios para la ciudadanía en la práctica.
El modelo pontevedrés será ligeramente distinto al propuesto por la DGT e incluirá un coche con la emisión de gases y en vez de adjuntar debajo las imágenes de las etiquetas distintivas para vehículos de bajas emisiones, indicará que las excepciones de acceso serán para "tráfico necesario y servicios".
El representante del PP de Pontevedra, Rafa Domínguez, ha puesto sobre la mesa la polémica respecto a la implantación de estas señales (que se hará "lo antes posible"), criticando que la ZBE acotada por el Concello es una medida "chapucera" que abarca gran parte de la ciudad y no un núcleo urbano reducido como en otras ciudades españoles. Además, ha alertado de posibles multas a los conductores que no cumplan la normativa y, tal y como expone Europa Press, ha pedido "claridad" al organismo municipal.
En este sentido, el concejal de Movilidad ha recalcado que Pontevedra lleva desde el 1 de enero con la ZBE en funcionamiento y ha defendido que los conductores podrán seguir circulando por la urbe "como llevan haciendo en los últimos años", pues la "tercera vía" aprobada para la Boa Vila libera a los usuarios de pagar por circular o de tener ‘eco etiquetas’ en los vehículos.
Mosquera ha reconocido el "choque normativo" que pueden tener los conductores que procedan de otras ciudades con un modelo de bajas emisiones distintos, pero cree que es "como ya pasa ahora" con las áreas definidas de prioridad peatonal. Así, la solución "inevitable" para el edil pasa por "informarse y comprobar las limitaciones".