La Audiencia Provincial de Pontevedra ha confirmado la condena a un menor por agredir a su expareja, a la que llegó a poner un cuchillo en el cuello para amenazarla.

En la sentencia, recogida por Europa Press, se explica que el joven deberá cumplir 12 meses de libertad vigilada y de alejamiento de su expareja. También tendrá que realizar un programa de prevención de violencia de género e indemnizar a la víctima con 107 euros por las lesiones y 959 euros por un móvil que rompió, así como pagar al Sergas 395 euros.

Los hechos se remontan a febrero de 2023, cuando los jóvenes, que habían mantenido una relación sentimental hasta agosto de 2022, se encontraron en una discoteca y fueron luego a dormir juntos al domicilio del padre de la chica.

Al entrar en el piso, el joven le recriminó que "hubiera bailado con todos" en la discoteca y que hubiese quedado con otro chico. "Tras eso, se puso agresivo, cogió el móvil de la joven y lo tiró al suelo, rompiéndolo, y le empezó a dar puñetazos, agarrándola del pelo y tirándola al suelo, donde siguió propinándole golpes", recoge la sentencia.

A la mañana siguiente, la víctima le pidió el móvil para hablar a su madre y el procesado, para evitar que le contase lo sucedido, "le puso un cuchillo en el cuello". En una conversación posterior, ella le preguntó por qué la trataba así y él respondió: "porque me tocas los cojones, entonces te tengo que dar unas hostias".