VIGO, 6 Ago. (EUROPA PRESS) –

Trabajadores de la concesionaria de bus urbano de Vigo, Vitrasa, se ha concentrado este viernes frente al Ayuntamiento de la ciudad, coincidiendo con la segunda jornada de huelga, para denunciar los incumplimientos de la empresa y el "inmovilismo" del gobierno municipal ante el conflicto.

Así, la plantilla ha trasladado las protestas a las puertas del consistorio, y ha recordado que la empresa responsabiliza al gobierno local de los atrasos en los pagos de las nóminas.

Los trabajadores de Vitrasa viven este viernes su segundo día de huelga, convocada para denunciar el incumplimiento del convenio colectivo, la negativa de la empresa a negociar un nuevo acuerdo y las condiciones laborales que sufren, con jornadas de conducción continuada durante 10 horas y situaciones de estrés "extremo".

También han recalcado que la prestación del servicio es deficiente por falta de personal y muchas veces se impide a los viajeros subir al bus en las paradas por tener aforo completo, "habiendo buses en la cocheras".

Según han explicado, ante esta situación, el Ayuntamiento, "como adjudicador" del servicio, debería requerir a la empresa "para que dé una solución inmediata". Del mismo modo, han criticado que el alcalde, Abel Caballero, no haya respondido a su solicitud de mantener un encuentro.

La huelga continuará durante todo el fin de semana (sábado y domingo) y han anunciado que se concentrarán en las inmediaciones de Montero Ríos, donde los próximos días se celebran las competiciones del festival O Marisquiño.