La Policía Local de Vigo ha rescatado a siete perros abandonados a los que su dueño no podía alimentar por haber sido detenido y haber ingresado en prisión. Los animales, según informó un amigo del propietario, llevaban cinco días sin comer ni beber, solos en una casa okupa.

Los agentes fueron informados por un amigo del dueño de los perros, que alertó de que, tras el ingreso de éste en la prisión de A Lama, nadie se había podido hacer cargo de los animales. Por ello, una patrulla se desplazó hasta la casa okupa donde vivía el detenido con sus perros, comprobando que no tenían comida ni agua y que estaban muy nerviosos.

Recogieron y trasladaron a los siete perros, cuatro machos y tres hembras, a una protectora, donde se les proporcionó alimento y agua, además de cuidados veterinarios a una de las hembras, que tenía signos visibles de sarna.