Abel Caballero firmó con los vigueses este pasado domingo un quinto mandato y la tercera mayoría absoluta para gobernar la ciudad. El líder socialista consiguió, una vez más, un apoyo masivo: El 60,86 por ciento de los 136.470 votos que se depositaron en las 372 urnas repartidas por los 80 colegios electorales, es decir, 82.313, llevaron escrito su nombre.
El que será el mandatario de la ciudad olívica durante los próximos cuatro años ganó con una ventaja de 57.181 votos sobre la segunda fuerza, el Partido Popular. Sin embargo, los populares le arrebataron protagonismo al líder ponteareano en las mesas repartidas por la zona costera de Oia y por la más céntrica de la ciudad -Beiramar, Montero Ríos, García Barbón, Plaza de Compostela y Policarpo Sanz-. En este sentido, cabe subrayar que Caballero perdió un 6,76 por ciento de apoyo si se tienen en consideración los datos de las municipales de 2019.
Pese a lo anterior, el color rojo dominó el mapa de los 20 barrios vigueses, lo que se tradujo en 19 concejales para el Partido Socialista -uno menos que en los comicios de 2019-. Así, el Partido Popular de Marta Fernández-Tapias logró sumar un concejal más para su bancada en Plaza del Rey, pasando de cuatro a cinco; y los nacionalistas, con Xabier P. Igrexas subieron a tres ediles su representación en la Corporación viguesa.
Los populares rompieron el monocromo en el centro, con un apoyo a su candidatura del 45,93 por ciento, frente al 28,19 por ciento que obtuvo Caballero. También en la zona costera de Oia, en donde el voto favorable al PP fue del 49,87 por ciento, mientras que el actual alcalde en funciones se anotó el 29,77 por ciento de las papeletas.
Marta Fernández-Tapias valoró los resultados de manera positiva, pues dijo que su formación había logrado cumplir los tres objetivos marcados: "El primero era poner un punto de inflexión a los resultados que habíamos obtenido en la última década. Hemos sumado un concejal e incrementado el apoyo en un 35 por ciento, mientras que el Partido Socialista, que ha tocado techo, perdió seis puntos", precisó la líder del PP. "También dijimos que un voto al PP ayudaría a acelerar el fin del ‘sanchismo’ y lo hemos logrado. El Partido Popular ha ocasionado un ‘tsunami’ en España", añadió Fernández-Tapias, quien también se congratuló de haber logrado un cambio en la Diputación.
Las zonas y calles que más respaldaron a Caballero
A excepción de las dos zonas que dominaron los populares de Vigo, Caballero arrasó en el resto de las mesas con un porcentaje medio del 60 por ciento. Sin embargo, el socialista encontró su bastión en lugares como Sampaio, donde cosechó el 75,25 por ciento de los votos, frente al 12,52 por ciento que, en este caso, obtuvo el PP. También en la calle de Naia, en donde Caballero se anotó un 74,29 por ciento de los votos frente a la segunda fuerza más votada en este lugar, el BNG, que se llevó un 9,09 de las papeletas.
A Pardaíña es uno de los puntos en los que el regidor en funciones vigués cuenta con el electorado más fiel. Aquí cosechó el 70,90 por ciento de los votos, mientras que la segunda fuerza fue el BNG, con el 12,10 por ciento.
Por último, A Florida votó masivamente a Caballero. En este caso, el 71,15 por ciento de los electores de esta zona se declinaron por el artífice de la Navidad viguesa, cediendo al Partido Popular, la segunda fuerza, el 13,17 por ciento de las papeletas.
Vigo es "otra galaxia"
Precisamente, Abel Caballero recuperó esta mañana su agenda municipal y aprovechó para hacer balance sobre los comicios municipales, reconociendo, en primer lugar, la ventaja que obtuvo sobre el PSOE, a nivel estatal, autonómico -en el caso de Galicia- y provincial -en Pontevedra-, la formación de Alberto Núñez Feijóo. "Sin embargo, cuando entramos a analizar Vigo, entramos en otra galaxia", subrayó el alcalde en funciones de Vigo. "La lista que yo encabezo se llevó el 61 por ciento del apoyo frente al 18,58 del Partido Popular. Les ganamos en 43 puntos", añadió.
Por otro lado, Caballero comparó lo ocurrido en Vigo con otras ciudades de más de 250.000 habitantes como Málaga, en donde la lista más votada fue la del Partido Popular, con un 49,17 por ciento de los votos -12 punto menos que lo que obtuvo en Vigo el PSOE-.
El regidor concluyó que su triunfo "es incontestable, sin matices". Además, insistió en que "ganar en 369 mesas y perder en tres solo tiene un precedente en las grandes ciudades: "El nuestro en las elecciones de 2019 que ganamos en todas".
Por último, Caballero se refirió a la pérdida de votos en la zona centro y, concretamente, en la Casa das Artes, donde precisó que había sido de 94 votos: "Algunos hablan de esta zona y la relacionan con el coste de la Navidad. Pues el coste de la Navidad fueron, entonces, 94 votos de un total de 82.313", dijo Caballero. En este extremo, el socialista se comprometió a "resolver algunos elementos negativos" que tiene la Navidad para los ciudadanos.
Para terminar, en el ámbito político, el regidor hizo alusión nuevamente al resultado obtenido por el PP: "Con uno similar, en 2019, su candidata dejó la política".
El BNG se hizo grande en lugares como Teis o Lavadores
El Bloque Nacionalista Galego de Xabier P. Igrexas cosechó de las urnas viguesas casi 15.000 apoyos, pero, donde se hizo más fuerte esta formación fue en barrios como Teis, en donde se convirtió en la segunda fuerza más votada con el 15,52 por ciento de las papeletas -Caballero se llevó el 64,18 por ciento-.
Pérez Igrexas también fue la segunda opción en Lavadores, en donde se quedó con el 14,73 por ciento de los votos. El actual alcalde en funciones se anotó, en este barrio, el 67,42 por ciento.
En definitiva y según los datos que hizo públicos la propia agrupación, el BNG de Vigo fue la segunda fuerza en 41 mesas electorales. Por ello, y por haber incrementado el número de ediles hasta los tres, los nacionalistas aseguraron este martes que trabajarán para ser "a alternativa política na primeira cidade galega".
Por último, Xabier P. Igrexas se mostró optimista de cara al futuro: “Nos últimos catro anos, cun único concelleiro, fomos quen de nos referenciar como a verdadeira oposición, pero unha oposición construtiva e con propostas. Agora, co empurre das máis de 15 mil persoas que votaron BNG o pasado 28M, imos traballar para sermos de novo unha forza determinante e converternos na alternativa das moitas viguesas e vigueses que saben que Vigo merece máis".