La sala de lo Penal 3 de Vigo ha acogido este jueves el juicio contra un hombre natural de León acusado de los delitos de sexting -difusión de imágenes íntimas sin consentimiento- y de abuso sexual a una menor. Tras un acuerdo de conformidad, el individuo aceptó la pena de 10 meses de prisión por el delito de sexting y otro año de cárcel por el de abuso sexual.
Por otro lado, el condenado no podrá desempeñar trabajos que impliquen su contacto con menores durante un periodo superior en seis años a las citadas penas de prisión interpuestas. Tampoco podrá comunicarse con la víctima o acercarse a ella a menos de 300 metros durante el mismo tiempo.
A la condena de conformidad se le ha aplicado la atenuante de reparación del daño debido a que el acusado consignó la indemnización que se le reclamaba por daños morales, de 5.000 euros. La sala ha acordado suspender la ejecución de la pena por un período de dos años a condición de que el procesado no delinca en ese tiempo y cumpla las medidas recogidas en la sentencia condenatoria.
Los hechos juzgados
Todo ocurrió en 2021. Por aquel entonces, la víctima tenía 12 años de edad y el procesado contactó con ella mediante Instagram. Con el paso de las semanas, el hombre empezó a presionar a la pequeña para que le enviase fotos y vídeos de carácter íntimo -lo consiguió, pese a que la niña había dejado claro que era menor de edad-.
Finalmente, la menor desveló lo que estaba ocurriendo y sus progenitores interpusieron una denuncia previa a que se consumase una cita entre la menor y el acusado. El acusado estaba dispuesto a viajar desde León a Vigo para reunirse con ella.
Por último, también ha trascendido que la misma menor también fue contactada por otro usuario de Instagram que tenía el mismo propósito. Sin embargo, el individuo reside en el extranjero y no ha sido localizado.