La Policía Local de Vigo detuvo el pasado martes 31 de octubre a un varón por saltarse la orden de alejamiento contra su expareja. Los hechos tuvieron lugar sobre las 21:17 horas, cuando se recibió el aviso de que una mujer había entrado en la gasolinera Cepsa de la Avenida de Madrid muy agitada pidiendo un teléfono para llamar porque su expareja le había robado el suyo.
Sin embargo, tras ello se fue de la gasolinera sin decir nada más. El requirente del servicio policial facilitó la descripción de la mujer para que pudieran localizarla. La encontraron en una parada de bus cercana al lugar y explicó a los agentes que duerme a diario en la antigua estación de buses, donde apareció su expareja dispuesto a dormir con ella. Como se negó, él le robó el teléfono y ella se fue a la gasolinera para llamar a la policía.
La mujer relató a los agentes que su expareja, además, no estaba cumpliendo la orden de alejamiento que tenía impuesta. La patrulla se acercó hasta la antigua estación de bus, donde estaba el hombre, y comprobaron que efectivamente le constaba una orden judicial, por lo que fue detenido.