Después de la Nochebuena y la relativa calma del día de la Navidad, celebrada este pasado lunes, el movimiento ha regresado al centro de la ciudad olívica, donde este martes se ha vivido una nueva jornada de tráfico denso. Y es que todavía son muchos los que quieren acercarse hasta Vigo para descubrir sus luces, inauguradas hace un mes escaso -el día 24 de noviembre-.

La situación no ha sido tan intensa, no obstante, como la que se vivió el pasado día 1 de diciembre, día en el que la afluencia de visitantes portugueses -que en su país de origen celebraban una festividad- coincidió con una manifestación de los trabajadores de Vitrasa. Pero sí se ha instalado cierto caos circulatorio en algunas calles del centro, donde el sonido del claxon de los coches ha sido una constante desde pasada la media tarde.

Los puntos más conflictivos en este sentido se han producido en la salida del túnel de Beiramar -paellera-, y también en Vía Norte – Urzáiz, centro neurálgico de las luces y para el acceso al centro comercial Vialia, y en Gran Vía -a la altura de El Corte Inglés-. También se han producido atascos en García Barbón.

Cabe recordar que el Concello de Vigo mantiene activado un plan de seguridad en estas fechas, por medio del que se restringe el acceso al centro de la ciudad entre las 17:00 horas y las 23:00 horas, por lo que se recomienda aparcar en zonas alejadas del centro urbano -es el caso de los aparcamientos disuasorios de Samil- y acudir a él caminando.

Salida de la AP-9. Foto: Cámaras de tráfico del Concello de Vigo