El Pleno municipal del Concello de Vigo celebrado el pasado jueves en el que se aprobó el PXOM de manera provisional continúa coleando por las circunstancias en las que se desarrolló.
La sesión estuvo marcada por las protestas de los trabajadores de Vitrasa, que irrumpieron en el salón de de Plenos durante la celebración, y los integrantes de la plataforma Avibe, que se concentraron en la Plaza del Rey. Ahora, es el BNG el que ha denunciado que se desplegó un "excesivo e injustificado" dispositivo policial para acceder al salón.
Según un comunicado remitido por la formación nacionalista, se vetó la entrada de algunos vecinos, lo que supone una "bunkerización antidemocrática y listas negras" impuestas por el gobierno local, personificado en la figura del alcalde, Abel Caballero.
"Los Plenos son un acto público"
"Desde el BNG tenemos que recordarle al alcalde que los Plenos son un acto público, y que toda la ciudadanía tiene derecho de poder seguirlos en directo", ha manifestado el portavoz municipal del BNG de Vigo, Xabier P. Igrexas, que se ha referido a la existencia de "listas negras" con nombres y apellidos de personas a las que se impidió la asistencia a la sesión plenaria "sin ningún tipo de motivo".
Según Igrexas, los asientos estaban ocupados por "militantes y simpatizantes del PSOE" que fueron convocados "para aplaudir las intervenciones de los representantes socialistas", mientras no se permitió el acceso de más público a pesar de haber asientos libres.
"Es una muestra más de la total falta de respeto del alcalde cara al Pleno como máximo organismo de representación democrática de la ciudad", ha reprochado el portavoz nacionalista. "El problema de Abel Caballero es que no entiende que Vigo va mucho más allá de los 19 asientos del PSOE, que las viguesas y los vigueses que no lo votaron o discrepan de él son también viguesas y vigueses de primera", ha concluido Igrexas.