Tras varios días sin localizar a su madre, una mujer de edad avanzada residente en Vigo, un vecino de Moaña acudió a unos agentes de la Policía Local que estaban realizando labores de control de tráfico en la calle para pedir ayuda.

El hombre estaba en gran estado de nerviosismo, pues su madre vivía sola y no respondía al teléfono y tampoco había ido a clases de pilates los días anteriores, como le había alertado una amiga de esta.

La intervención policial ocurrió el pasado 10 de enero y el varón llevaba sin poder ponerse en contacto con su madre, de 79 años, desde el día 7. La mujer residía sola en la calle Torrecedeira, por lo que los agentes se trasladaron hasta el domicilio. Allí comprobaron que la puerta estaba bloqueada con la llave echada por dentro.

Los bomberos acudieron a colaborar en el operativo y se descolgaron desde el piso superior para acceder al interior de la vivienda. La Policía Local inspeccionó las habitaciones y encontró en una de ellas a la mujer, que estaba semidesnuda y desplomada en el suelo con el cuerpo amoratado. Se solicitó una ambulancia para trasladarla al hospital Álvaro Cunqueiro, donde evoluciona favorablemente.