La Capitanía Marítima de Vigo, que este jueves recibió la visita del subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada; incrementó su actividad controladora durante el pasado ejercicio de 2023. Más concretamente, inspeccionó un total de 723 buques y emitió 1.975 certificados de navegabilidad.
Losada conoció en las últimas horas la labor que se lleva a cabo desde este organismo. En él se ordena y vigila el tráfico de buques y sus efectivos velan por la seguridad marítima tanto en la ría de Vigo, como en la de Pontevedra. Y es que en los puertos estatales de Vigo y Marín entran, anualmente, unos 8.000 barcos.
Del mismo modo, también en 2023 se tramitaron desde el organismo un total de 4.313 expedientes de registro de buques, un 15% más. Este incremento ha sido paralelo al aumento de barcos construidos en los astilleros vigueses, así como de buques que se sometieron a ampliación y reparación.
Por último, se realizaron 54 inspecciones a buques extranjeros arribados a Vigo y Marín para la emisión del Memorandum of Understanding (MOU) y se hicieron otras diez de la ‘Lista Blanca’ –actuaciones preventivas en barcos españoles que zarparon a puertos extranjeros para ser sometidos a revisión MOU-.
Con respecto a la actividad sancionadora, se tramitaron 185 expedientes derivados de 355 denuncias recibidas en 2022. En total, el 31 % se correspondían con infracciones leves, un caso fue elevado a la Audiencia Nacional, y 8 fueron archivados. La cuantía de las sanciones impuestas en 2023 superó los 1,2 millones de euros, tal y como recogió Europa Press.
En esta oficina se expidieron o renovaron casi 500 títulos y 800 tarjetas profesionales, 2.356 certificados de suficiencia y formación marítima, 307 libretas de navegación y 749 documentos de identidad del marino (DIM), entre otros. Además, durante 2023, el organismo ordenó la paralización temporal de 109 buques y la paralización definitiva de dos; asimismo, tramitó 9.880 expedientes de enrolamiento y desenrolamiento de tripulantes.