La 'narcocasa' situada al lado de la Ciudad de la Justicia, en el entorno de la calle Pizarro de Vigo, será demolida por el Ayuntamiento ante la inacción de los propietarios de la parcela, responsables de la conservación del inmueble. Así lo ha informado este martes la edil de Urbanismo, María José Caride, quien ha asegurado que después se pasará la "oportuna factura" a los dueños.

La decisión de Urbanismo llega tras múltiples denuncias vecinales e incidentes en el inmueble; el último, este pasado sábado, cuando se produjo el tercer incendio en menos de una semana. Las condiciones ruinosas del edificio, ubicado en la calle Padre Feijóo, ya eran conocidas por el departamento municipal y tenía un expediente abierto.

"A pesar de que los propietarios alegaron que tenían problemas entre ellos y por tanto, dificultades para proceder al derribo, la Xerencia de Urbanismo les instó a ello", ha defendido Caride. Finalmente, la demolición se llevará a cabo mediante ejecución subsidiaria y el Concello contratará el proyecto de derribo y su realización "de forma inmediata".

Además, la concejala ha subrayado que la vivienda presenta un estado ruinoso y está precintada y espera que "se respeten los balizamientos". 

Celebración de la noticia

El portavoz municipal del Partido Popular vigués, Miguel Martín, ha celebrado la declaración de ruina de la 'narcocasa' y su "derribo inminente". El PP había denunciado en sendas ocasiones la situación del inmueble, haciéndose eco de las quejas de los vecinos de la zona.

Martín cree que el Gobierno de Caballero ha abandonado "su inacción" para "dar una solución definitiva" al "problema de seguridad ciudadana" y "trapicheo constante de drogas", una situación que "se ha ido agravando con el tiempo a pesar de la presencia policial". 

Además, el edil 'popular' ha explicado que tras el incendio del pasado sábado en el inmueble "los okupas han seguido entrando en su interior saltándose el precinto policial, haciendo que la situación sea aún más peligrosa". Por ello, pide "celeridad" al Gobierno local para ejecutar las obras de derribo y que "el procedimiento no se eternice en el tiempo".