El premio de consolación de ser subsede del Mundial 2030 no ha sido bien recibido por el Concello de Vigo, tras hacerse oficial que será A Coruña la elegida como sede y el estadio de Riazor el que acogerá los partidos de la Copa del Mundo.
El teniente de alcalde y concelleiro de Fomento, Javier Pardo, ha señalado que no se ha recibido ninguna comunicación oficial por parte de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) con respecto a la solicitud de Vigo, que "presentó un proyecto sólido y consistente" además de ser "un concello con sobrada capacidad presupuestaria y organizativa", asegura Pardo en un audio remitido a los medios.
"Nos encontramos ante una movilización política contra Vigo", sentencia Pardo, que señala a Rafael Louzán, presidente de la Real Federación Galega de Fútbol (RFGF) y viceprsidente de la RFEF, como responsable. También pone en evidencia "la falta de apoyo de la Xunta de Galicia" que nunca ha mostrado "ninguna interpretación sobre la propuesta de la ciudad", a pesar, insiste, en la conocía perfectamente.
"Desde el Concello exigimos explicaciones, queremos saber quién está detrás de una decisión que el señor Louzán adelantó hace 15 días en el estadio de Riazor, cuando a día de hoy el Concello no ha recibido notificación oficial", prosigue el teniente de alcalde, que exige "ecuanimidad" a la RFEF en sus decisiones y "explicaciones" a Louzán "sobre los criterios en los que se basó para decir que Vigo había quedado fuera de las sedes elegidas".
Desde el Concello aseguran que seguirán "defendiendo la propuesta de Vigo con todas las medidas a nuestro alcance", ya que consideran "posible" que haya 13 sedes para que "todos" estén representados.