El final del verano es una época un tanto deprimente, pero también tiene su lado positivo. Terminan las largas retenciones de camino a la playa, la masificación de determinados destinos turísticos o la subida de precios de vuelos y hoteles. El otoño llega con un ambiente más relajado para aquellos que quieren (o pueden) tomarse unos días libres. Además, se convierte en la temporada más asequible para viajar.

La actual situación de las aerolíneas de bajo coste dificulta un poco la organización de viajes. Este verano ha estado marcado por los retrasos en los vuelos de Ryanair desde Santiago de Compostela con motivo de la huelga de tripulantes de cabina de pasajeros. Los trabajadores reclaman a la empresa retomar la negociación de un convenio colectivo que recoja unas condiciones laborales dignas y bajo la legislación española.

Por otro lado, la expansión de Ryanair en el aeropuerto de Vigo ha quedado estancada. El alcalde anunció a comienzos de agosto que la compañía no se presentaría al concurso de licitación de Peinador, por lo que solo mantendrá su actual conexión con Barcelona.

Con dichas circunstancias sobre la mesa, estas son algunas propuestas para organizar un pequeño viaje desde Vigo aprovechando que la temporada baja se acerca.

Barcelona

La ciudad condal está comunicada de forma directa con Vigo mediante los servicios de Vueling y Ryanair. Hay dos vuelos diarios que parten desde Peinador, uno a las 9:00 horas y otro a las 22:35 horas. Mientras tanto, para regresar desde Barcelona hay otras dos conexiones, a las 6:35 y a las 15:40 horas.

El precio de los vuelos para el mes de octubre no alcanza los 50 euros en total (es decir, trayecto de ida y vuelta). Teniendo en cuenta que volar entre semana suele ser más barato que hacerlo sábados, domingos o festivos, si se quisiera viajar por ejemplo del 10 al 14 de octubre, la ruta Vigo-Barcelona costaría 37 euros por pasajero.

Madrid

La capital es otra de las pocas ciudades a las que se puede volar desde Vigo sin escalas. Las compañías que operan estas conexiones son Iberia y Air Europa y disponen de cuatro salidas diarias: 6:35 horas, 8:40 horas, 12:35 horas y 21:40 horas.

Los billetes a partir de finales de septiembre rondan los 50 euros, pero aún se pueden encontrar vuelos a 60 para las últimas semanas de verano. Viajar del 19 al 22 de septiembre —de lunes a jueves— costaría 57 euros. Para una escapada de fin de semana el precio no se dispara demasiado. Por ejemplo, del 23 al 25 de septiembre hay billetes por 48, 51 o 70 euros, incluyendo el trayecto de ida y de vuelta.

Bilbao

El País Vasco es un paraíso de la costa cantábrica que vale la pena descubrir. Iberia dispone de vuelos directos desde el aeropuerto de Peinador a Bilbao, ideales para una visita de unos días o un fin de semana.

El precio habitual parte de los 100 euros (ida y vuelta), aunque es posible adquirir billetes por algo menos de dinero si se vuela en días entre semana. Por ejemplo, volar de Vigo a Bilbao del 10 al 14 de octubre saldría por 88 euros. El trayecto tan solo dura 1 hora y 10 minutos.

Lisboa

Portugal siempre es una buena idea. La capital lusa no cuenta con vuelos directos con Vigo; para ir en avión hay que hacer escala en Madrid y el precio medio es de 150 euros. Sin embargo, existe otra opción más económica ideal para escapadas en las que se dispone de un par de días extra: el servicio de Flixbus.

La compañía de autobús cuenta con dos lanzaderas diarias desde la estación de la Avenida de Madrid, que parten a las 10:50 y a las 13:50 horas y conectan con la estación de Oriente, en Lisboa. Desde esta, la conexión con el centro urbano es sencilla mediante el metro.

Los trayectos de Flixbus duran aproximadamente 6 horas y media y hacen trasbordo en Oporto. El precio máximo que pueden alcanzar estos viajes no superan los 40 euros (ida y vuelta). Además, hay ofertas de billetes a 9 o 12 euros cada poco tiempo.

Oporto

Oporto es uno de los destinos predilectos de los vigueses por su cercanía. Si te apetece acercarte a esta preciosa ciudad pero no estar pendiente del coche, la empresa Flixbus cuenta con servicio directo. El trayecto dura algo más de 2 horas —hace paradas en varias localidades portuguesas— y finaliza en pleno casco histórico. Los billetes se venden desde 6 euros el viaje y hay cinco salidas diarias.

Si prefieres viajar en ferrocarril, el tren Celta hace dos salidas al día desde la estación de Guixar. Su duración es similar al autobús y el destino es la estación de Campanha. Los precios varían desde 5,25 a 11,95 euros el trayecto.