Todo empezó como un hobbie en 2016 como resultado del duelo por el fallecimiento de su padre. María Sánchez cuenta que comenzó a publicar en un blog "por entretener la cabeza", a raíz de su pasión por la moda y la decoración y en medio de este proceso, como si de una terapia se tratase. Bajo el nombre de Mamisweet, la pontevedresa inauguró un blog de moda al que dedicaría mucho esfuerzo y cariño y con el que ha conseguido ir formando la personalidad que tiene hoy en redes.

De su "blog de moda para mujeres con poco tiempo" evolucionó a la María que es hoy: una mujer todoterreno con trucos para (casi) todo y muchas seguidoras que admiran su forma de cuidar su casa y a su familia. Al ver que dedicaba muchas horas a su blog y dependía de su marido para sacarse fotos, decidió probar suerte en Instagram, tras un nuevo bache emocional que hizo que paralizase toda su presencia en internet. "El año pasado me apeteció retomarlo y al ver que podía hacer yo sola mis vídeos me animé a volver".

Explica que, antes que instagrammer es madre y profesora a tiempo completo en un colegio de Pontevedra, donde da clases de educación infantil. La pregunta de cómo saca tiempo para todo es casi obligatoria, a lo que responde que únicamente se puede dedicar a las redes los fines de semana: "Soy muy meticulosa y preparo los vídeos los domingos, contando con que publico tres a la semana, los programo y así me organizo y no desatiendo ni mi trabajo ni mis redes".

Con esta idea de llegar a todo (y ahora que sus hijos son algo mayores), ha construido una personalidad en redes sociales que hace que, sin dejar de lado su pasión por la moda, haya tenido éxito con varios de sus trucos "de toda la vida" para el hogar. La locura empezó de casualidad, con un vídeo "que en realidad era muy cutre, creo yo, pero que triunfó: únicamente enseñé cómo ordeno mis bolsos desde hace años, ya no recuerdo ni de dónde lo había sacado cuando empecé a hacer, pero el vídeo se hizo viral y me di cuenta de que a la gente le gustaba saber cómo ordeno yo mi casa".

Como toda una Marie Kondo de Pontevedra, María empezó a publicar vídeos en los que enseñaba cómo organizaba la cocina, el baño, la ropa… Poco a poco se fue haciendo un hueco entre las influencers de orden y limpieza, sin dejar nunca de lado su faceta de amante de la moda. "Me dijeron que era mejor dedicarme a un nicho concreto y no mezclar contenidos en mis redes, pero para mí no es algo profesional y no quiero dejar de hacer vídeos de moda, que es mi verdadera pasión", explica.

Del mismo modo empezó con su cuenta de TikTok, casi sin querer, haciéndose un hueco "en una red social que es más para jóvenes, sobre todo lo uso para ver trucos y probar si funcionan, y si me gustan los replico y se los enseño a mis seguidoras", dice María. "Lo más básico es casi lo que más gusta: hago vídeos de cosas que me apetecen y también algunos que me piden, sin olvidarme nunca de la moda y de la decoración de la casa".

Esta concepción de hobbie es lo que permite que María Sánchez siga manteniendo su cuenta de Instagram a su gusto, "porque por ahora no he facturado, primero porque no soy autónoma y segundo porque mi verdadera vocación es ser profesora". Sí que confiesa haber hecho alguna colaboración, en la que las marcas han contactado con ella para enviarle algún producto que ella prueba y, si le gusta, enseña a sus seguidoras.

Su público, que en su mayoría son madres con niños hasta la adolescencia, se interesa también por los looks diarios de esta pontevedresa, que confiesa que seguirá manteniendo su estilo monetice o no su contenido. "Esto es una afición, por ahora, veremos si cuando lleguen las vacaciones de verano tengo más tiempo para dedicarlo a hacer vídeos y puedo hacer más cositas", explica; "pero por el momento no he monetizado mi contenido ni pienso hacerlo".