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Hemos recomendado en incontables ocasiones Portugal como destino turístico, pero es que el país luso tiene infinidad de rincones que merece la pena visitar. Uno de sus atractivos es la proximidad con Galicia. Esto lo convierte en un buen lugar para pasar unos días de vacaciones, incluso con la compañía de los más pequeños de la casa y más allá de los meses de verano.

En esta ocasión, el enclave elegido es Coímbra y su ciudad de los "pequeniños". Toda la familia disfrutará de este parque temático, a una hora de distancia en coche de Oporto. Como su nombre indica, es un pueblo en miniatura. Los niños podrán corretear y explorar unas calles en las que todo es de su tamaño, hasta las casas. La entrada infantil cuesta seis euros (gratis para menores de dos años) y la de adultos, ocho.

La historia del parque

Este lugar tan especial fue idea de Fernando Bissaya Barreto, profesor de Medicina en la Universidad de Coímbra y político del siglo pasado. De su mente también surgieron proyectos como el Instituto Superior Miguel Torga o el Hospital Psiquiátrico de Lorvão. También creó la Fundación Bissaya Bareto para ayudar a las personas desfavorecidas de la localidad.

El encargado de trasladar la iniciativa a la realidad tangible fue Cassiano Blanco, arquitecto modernista de la época. Quisieron construir un terreno que representase toda la variedad paisajística y arquitectónica de Portugal, en diminuto; la primera fase de construcción comenzó en 1938. Abarcaba la recreación de las regiones de Tras-os-Montes y Minho. Se finalizó en torno a 1940.

En la segunda fase de la obra se habilitaron los monumentos del país a escala reducida, como el Convento de Cristo o el Palacio de Sintra. A finales de los años 50, se completó el proyecto con la reproducción de las estructuras más simbólicas de Azores, Madeira y las posesiones de ultramar (Brasil, Macao o la India).

¿Qué podemos ver allí?

La "ciudad de los pequeñitos" es un parque temático que cumple una misión pedagógica importante. Los niños y las niñas pueden conocer Portugal a su propia altura, entrando en las casitas en miniatura y asomarse a sus ventanas. Para los adultos también es un lugar interesante, pues relata la historia del país a través de su arquitectura. Además del pueblo mini, en el recinto se puede visitar el Museo del Traje.

Las áreas temáticas del parque son las siguientes. ¡En cada casa podrás encontrar un QR con su historia!

Casas regionales: la arquitectura típica de Portugal

Como explican en la web de la Fundación Bissaya, en esta área podemos encontrar un conjunto de casas regionales diseñadas por Cassiano Blanco e inspiradas en los modelos del arquitecto Raul Lino. También hay elementos típicos de una aldea portuguesa, como un molino, un pazo, ermitas o una capilla. En el centro del espacio está la estatua del primer rey de Portugal, Don Afonso Henriques. Diferentes foros de internet apuntan que esta zona es una de las preferidas de los peques.

Portugal Monumental

Este apartado reúne los monumentos más emblemáticos de Portugal, organizados por su ubicación geográfica y a modo de collage. Es un lugar de singular belleza y originalidad.  Podemos encontrar el Monasterio de los Jerónimos, el Convento de Cristo o la Torre de Belém, entre otros.

Exterior: las antiguas colonias del imperio

Portugal fue un gran imperio, al igual que España. Sus dominios se extendían por Asia, África y América del Sur. Por ello hay países en los que se habla portugués aún a día de hoy. En este recinto del parque se encuentra la arquitectura de esas colonias, especialmente de India y Macao, que tienen un pabellón propio donde se pueden encontrar colecciones de piezas que representan su fauna, su flora, su etnografía, objetos de artesanía y utensilios de uso cotidiano.

En la página de la Fundación describen que el recorrido de este área se divide según el océano que baña las antiguas colonias. Primero se visitan los del Océano Índico y al final los del Atlántico.

Portugal insular

Al igual que en España tenemos las Canarias y las Baleares, Portugal presume de Madeira y las Islas Azores. Los micro-edificios está rodeado por unos estanques que representan el océano Atlántico. En esta zona también hay un gran mapa con la leyenda "E se mais mundo houvera la chegara" ("Si hubiera más mundo allá llegaría", en referencia a los dominios del imperio portugués).

Coímbra diminuta

Por supuesto, la ciudad que acoge en su interior esta pequeña villa tiene su reproducción en miniatura. El núcleo de Coímbra está junto al grupo de Casas Regionales y está diseñado con la misma estética que Portugal Monumental. "Esta presencia especial era necesaria porque Coímbra es la ciudad guardiana de la lengua portuguesa a través de su Universidad, así como es la primera capital del Reino de Portugal", explican en la Fundación Bissaya Barreto.