Localizada en la vertiente centro-meridional de la provincia de Pontevedra, la localidad de Pazos de Borbén se extiende en todo su territorio a través de unos 50 kilómetros cuadrados. El municipio, perteneciente a la comarca de Vigo, delimita con los concellos de Redondela, Fornelos do Monte, Soutomaior, Mondariz y Ponteareas; y se divide a su vez en en torno a ocho pequeñas y particulares parroquias: Moscoso, Xunqueiras, A Ermida, Amoedo, Pazos, Borbén, Cepeda y Nespereira. En conjunto, Pazos de Borbén conforma un espacio con un importante patrimonio cultural, monumental, y sobre todo paisajístico.
En gran parte del territorio la naturaleza se mantiene casi intacta, ―a pesar de los devastadores incendios de 2017 y otros años― bañando la zona de bosques, desde Monte Galleiro (cuyo pico se sitúa a unos 670 metros de altura) a Pedra Quintana; así como de numerosos ríos, como el de Barragán, Pequeno (afluente del Oitavén) y Alvedosa al norte, o Borbén y Louro en la zona sur y cuyos ciclos terminan en el Miño. Es por todo esto y más, que la pequeña villa de Pazos de Borbén tiene tanto que ofrecer a sus visitantes: desde rutas de senderismo a yacimientos arqueológicos, arquitectura popular, fiestas tradicionales, enoturismo o gastronomía local, que permiten conocer Galicia en su estado puro.
Rutas de senderismo
En un entorno tan rural como el que representa Pazos de Borbén, la mejor manera de descubrir el entorno y su cultura del agua es a través de las diferentes rutas de senderismo existentes, entre las que destacan: la senda homologada de la Fraga de Barragán (PR-G164), el Sendero de Xunqueiras (PRG-26), la Levada de Casqueiros o la Ruta de los Miradores, puesta en marcha gracias a una iniciativa del propio ayuntamiento, que instaló hasta ocho bancos en miradores estratégicos de la zona.
La más completa y reconocida es la senda de Barragán, que discurre en paralelo a la cuenca del río del mismo nombre, con diferentes desniveles y a lo largo de unos 17,3 kilómetros. Se trata de una ruta circular de dificultad media alta, por lo que el itinerario puede dar comienzo casi desde cualquier punto, aunque el inicio del sendero está marcado en O Torreiro (San Salvador de Xunqueiras). Los senderistas podrán conocer de cerca el amplio patrimonio etnográfico de Pazos de Borbén a través de sus puentes, molinos, caminos forestales y enlosados, o los restos del asentamiento de "A Cidade".
La Ruta de los Miradores se ha convertido en otro de los recorridos imprescindibles de Pazos de Borbén, ofreciendo unas panorámicas inigualables de todo el Valle del Borbén. Siguiendo el trazado de esta ruta, los visitantes podrán alcanzar los altos de Santo Aparecido o la Pedraquetiña, entre otros. En conjunto, el itinerario transita a través de la red de principales balconadas del municipio, con sendas específicas para cada y coronadas todas ellas por emblemáticos e instagrameables bancos.
Cabe mencionar también el camino de Levada de Casqueiros, situado en la zona de Cuartos de Borbén. Las "levadas" eran canales artificiales creados para poder transportar el agua de los ríos hasta las zonas de regadíos o para ser utilizados en las maquinarias hidráulicas de los molinos, tan abundantes en la zona y también en toda Galicia. Esta pequeña senda, de apenas 2,2 kilómetros, fue remodelada para crear un paseo en el que se puede disfrutar de la naturaleza y la arquitectura popular en todo su esplendor, con paradas en puntos como el rectoral de Borbén, el Muíño de Cubelos o la presa de Casqueiros.
Fiestas gastronómicas
En Pazos de Borbén han sabido aprovechar su tradición culinaria para convertir los productos locales en los principales protagonistas de sus fiestas populares, que también se han visto afectadas con la llegada de la pandemia. Los visitantes de la localidad podrán aprender sobre la historia de la misma a través de su gastronomía en sus múltiples celebraciones. Una de las de mayor arraigo es la Fiesta del Huevo (Festa do ovo) de Pazos de Borbén, que tiene lugar a principios de mayo en la parroquia de Nespereira. La verbena cuenta con diferentes caminatas y eventos que culminan con una gran comilona en la que el plato principal es el huevo con chorizos y patatas, así como otras elaboraciones que incluyen dicho ingrediente, como las tortillas variadas o las empanadas de huevo y atún, otros clásicos en la zona.
La tradición gastronómica se materializa también en la Festa da Cacheira o la de la Chula. La llegada de la primavera marca la celebración de la primera de las mencionadas, donde los platos elaborados con alguna de las partes de la cabeza del cerdo son el principal atractivo de la romería. Todas las degustaciones se acompañan de actuaciones musicales del folclore gallego, atracciones para grandes y pequeños y una Feria de la Artesanía, Productos Ecológicos y Antigüedades digna de ver y visitar. Como último ejemplo de estas fiestas y tradiciones, cabe mencionar la tradicional Festa da Chula de Moscoso. El primero de septiembre es la fecha elegida para disfrutar de las elaboraciones de esta receta de leche frita en todas sus variedades, tanto dulces como saladas (de calabaza, el chocolate o el bacalao), a precios simbólicos (1 o 2 euros destinados a obras sociales del pueblo). Además, el gran xantar incluye en sus diferentes carpas las degustaciones de otros platos populares, como el churrasco, los callos, el pulpo, la paella o algunos postres caseros.
Yacimientos arqueológicos
La historia de Pazos de Borbén se mantiene viva gracias a un importante legado arqueológico que deja constancia de antiguos asentamientos, en sus diferentes etapas cronológicas, y supone uno de los grandes tesoros del municipio. Los de Castro do Monte do Cristo, el yacimiento de Buxel o el de Pedra Das Teixiñas, son sólo algunos de los ejemplos en el territorio. Se estima que todos estos vestigios se encuentran en un marco de tiempo que abarca desde el 3.000 a 1.800 antes de Cristo, a los datados en la Edad de Bronce (hasta el 600 d.C.). Por lo general, el asentamiento de culturas prehistóricas es más que evidente en Pazos de Borbén, ya que existen una multitud de grabados rupestres y castros en todo el área geográfica, principalmente en las parroquias de Amoedo, Cepeda, Moscoso y Borbén. De hecho, la de Amoedo cuenta con una senda arqueológica propia de unos 13 kilómetros, que incluye en su recorrido la visita a más de 80 petroglifos, como los de Masusán o Carballiños, y 18 mámoas, entre otros elementos.
Arquitectura tradicional
Esta localidad pontevedresa se encuentra repleta de construcciones que dejan patente la arquitectura tradicional de la Galicia rural a lo largo de los diferentes siglos. En las parroquias de Pazos de Borbén existen numerosas iglesias datadas entre los siglos XVI al XVIII, algunas de ellas erigidas sobre los restos de construcciones románicas, compuestas además por atrios, cementerios e imponentes panteones de piedra. También en la localidad los visitantes podrán encontrar un gran números de petos de ánimas del siglo XVIII, unos importantes monumentos religiosos de gran interés etnográfico e incluso histórico; los canastros, ahora en desuso, dejan constancia del pasado agrícola de la zona; y los fosos de lobos de la parroquia de Moscoso, utilizados para cazar a estos depredadores aproximadamente a finales del siglo XIX, son una curiosa construcción digna de visitar por tratarse de una rara avis en la zona.