El paraíso natural cerca Vigo custodiado por la figura de un lobo y otras esculturas
- La reserva natural de A Laxe, en Fornelos de Montes, es un enclave único donde ríos, naturaleza y esculturas se entrelazan en un paisaje repleto de arte y encanto
- Más información: Fornelos de Montes: entre valles fluviales, rutas de senderismo y patrimonio histórico
En la comarca de Vigo, donde el Atlántico acaricia las costas verdes y onduladas de las Rías Baixas, cada rincón es una invitación a perderse en paisajes que parecen recién salidos de un cuento. Susurros del agua entre los árboles, ríos que dibujan caminos secretos y senderos que se pierden más allá del horizonte conforman un refugio perfecto para los amantes de la naturaleza. El aire aquí es diferente, fresco y puro, como un regalo que solo los grandes pulmones verdes pueden ofrecer.
Entre los muchos tesoros verdes que esconde la comarca de Vigo, hay un lugar en el interior de la misma que deslumbra por su aura de belleza y misterio. Se trata de un paraíso natural vigilado por la imponente figura de un lobo de piedra y salpicado por otras esculturas que rinden homenaje al rico patrimonio histórico y etnográfico de Fornelos de Montes. Situado a tan sólo media hora del bullicioso centro de Vigo, este cautivador destino aguarda listo para desvelar su magia a quienes estén dispuestos a explorar sus secretos.
El paraíso de Fornelos de Montes
En el interior de la comarca de Vigo, Fornelos de Montes se despliega como un lienzo vivo, dibujado entre serpenteantes ríos, regatos cristalinos y cascadas que hipnotizan con la belleza indomable de su caída. Sus valles y bosques fluviales forman una reserva natural donde perderse no es solo una opción, sino el plan perfecto para quienes buscan sumergirse en la magia de la naturaleza en su estado más puro. Y es que Fornelos es un canto a la vida silvestre, y A Laxe, su joya más preciada.
Así lo proclama un pequeño cartel justo a la entrada de esta parroquia repleta de encanto: "Paraíso natural", y no podría ser más acertado. Es precisamente aquí, en las entrañas de la aldea A Laxe, donde un extraordinario outeiro se ha convertido en una suerte de museo a cielo abierto, poblando en sus pequeñas elevaciones por algunas esculturas que rinden tributo a la fauna que habita en estos montes, celebrando con arte y piedra la vida que late en cada rincón de Fornelos de Montes. Además, los alrededores de este paraíso fornelense se encuentran rodeados por una riqueza fluvial y natural mágica, enclavado entre bosques de ribera y saltos de auga tan hechizantes como el de la Fervenza de Airoa o la Cascada da Feixa.
La figura del lobo, imponente y enigmática, se alza como guardián de esta singular área recreativa, situada a pie de carretera en la reserva natural de A Laxe, un rincón repleto de encanto y carácter salvaje. Tallada en piedra y alzada sobre un pedestal del mismo material, la escultura del animal posa con sus patas apoyadas sobre una roca mientras su cuerpo se arquea en posición de aullar hacia la luna, como un tributo eterno a la naturaleza que lo rodea.
Unos metros más abajo, otra imponente escultura reclama su atención: un halcón de alas desplegadas, erguido sobre otro pedestal que magnifica su porte, como si estuviera listo para lanzarse a sobrevolar estos montes. Ya en la zona más baja del outeiro, una curiosa fuente se revela como una joya inesperada, con una silueta que recuerda al martillo de un herrero, combinando naturaleza y arte en una perfecta armonía.