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En otoño, las castañas se convierten en uno de los productos estrella de la gastronomía en muchas regiones de España, especialmente en Galicia, Asturias y el norte de Castilla y León. La llegada del otoño trae consigo la recolección de este fruto, que ha sido parte de la cocina tradicional durante siglos. Las elaboraciones con castañas son muy variadas y van desde platos dulces hasta recetas saladas.

Una forma muy simple de disfrutar las castañas es cocerlas en agua con un toque de sal o hojas de laurel. Esta preparación es típica en muchas partes de Galicia y otras regiones montañosas de España.

Sin embargo, también se pueden elaborar sopas con castañas, así como el cocido gallego con castañas es una versión tradicional y más otoñal del clásico cocido gallego, uno de los platos más representativos de Galicia. Se trata de una variante, las castañas se incorporan para aportar un toque dulce y terroso que combina de manera excelente con los sabores intensos de las carnes saladas y los embutidos.

El cocido gallego con castañas es una variante deliciosa y especial del cocido tradicional que resalta los sabores de otoño. Las castañas aportan un toque dulce y suave que equilibra la intensidad de las carnes saladas y los grelos amargos, creando un plato reconfortante, ideal para los meses más fríos. Para elaborarlo necesitas los siguientes ingredientes:

  • Castañas: Pueden ser frescas o secas. Si son secas, se deben hidratar previamente.
  • Lacón: La pieza curada y salada del cerdo, que aporta mucho sabor.
  • Cacheira (cabeza de cerdo): A menudo se incluye una parte de la cabeza del cerdo, como la oreja o el morro, muy típica en Galicia.
  • Chorizo gallego: Aporta un toque ahumado y sabroso.
  • Morcilla gallega: De sabor suave y ligeramente especiado.
  • Costilla salada de cerdo: Muy utilizada en el cocido para dar sabor y aportar carne.
  • Grelos o nabizas: Son un ingrediente esencial en el cocido gallego tradicional. Su sabor amargo contrasta perfectamente con la dulzura de las castañas.
  • Patatas gallegas: Fundamental en el cocido gallego, aportan textura y cuerpo al plato.
  • Garbanzos: Opcionales en algunas versiones del cocido con castañas, aunque se suelen usar en el cocido tradicional.
  • Zanahorias (opcional): Algunas recetas añaden zanahorias para un toque adicional de dulzura y color.
  • Aceite de oliva virgen extra y sal.

En lo que respecta a los pasos para elaborar este plato, son los siguientes, teniendo en cuenta que se trata de una receta bastante sencilla de elaborar:

  1. En primer lugar, preparar las carnes. Si utilizas lacón, costilla salada o cacheira, debes ponerlas a remojo la noche anterior para desalar. Cambia el agua varias veces durante el remojo para eliminar el exceso de sal.
  2. En una olla grande, coloca las carnes desaladas (lacón, cacheira, costilla) y cúbrelas con agua fría. Llévalo a ebullición y deja que cueza a fuego lento durante unas 2 horas o hasta que las carnes estén tiernas. Si utilizas garbanzos, añádelos en este paso, ya que tardan en cocer.
  3. Añade también los chorizos y la morcilla cuando falten unos 45 minutos para que las carnes estén listas, para que se cocinen sin deshacerse.
  4. Si usas castañas frescas, hazles un corte en la piel y cuécelas en agua con sal y una hoja de laurel durante unos 15-20 minutos, hasta que estén tiernas pero no demasiado blandas. Si son castañas secas, hidrátalas la noche anterior y luego cuécelas en agua hasta que estén suaves.
  5. En otra olla, cocina las patatas peladas y cortadas en trozos grandes, y los grelos (o nabizas) durante unos 20-25 minutos. Puedes cocerlos en el mismo caldo de las carnes o en agua con sal.
  6. Una vez que las carnes estén casi listas, añade las castañas cocidas a la olla con las carnes, para que se impregnen de los sabores del cocido y aporten su toque característico. Cocina todo junto durante unos 10-15 minutos.
  7. Sirve el cocido de manera tradicional: las carnes (lacón, costilla, chorizo, morcilla) en una fuente, las patatas y los grelos en otra, y las castañas junto con las carnes o como acompañamiento.
  8. Puedes acompañar el cocido con un buen aceite de oliva crudo por encima de las verduras para realzar los sabores.

Consejos para hacer el cocido gallego con castañas

En algunas versiones del cocido gallego con castañas, se añaden guisantes o zanahorias para dar un toque de color. Además, las castañas secas son las más tradicionales para esta receta, ya que antiguamente se conservaban para el invierno.

No obstante, si tienes acceso a castañas frescas, puedes usarlas igualmente. El sabor ligeramente dulce de las castañas es lo que marca la diferencia con respecto al cocido gallego tradicional, y su textura suave contrasta muy bien con las carnes saladas y los grelos.

Las propiedades nutricionales del cocido gallego con castañas

El cocido gallego con castañas es un plato muy completo desde el punto de vista nutricional. En primer lugar, las castañas son ricas en carbohidratos complejos, fibra y vitaminas del grupo B, las castañas aportan energía y son una excelente fuente de minerales como el potasio.

Además, las carnes curadas como el lacón y la costilla aportan proteínas de alta calidad, además de grasas. Es importante moderar la cantidad de carne salada debido a su contenido en sodio.

Igualmente, los grelos son muy bajos en calorías y ricos en fibra, vitaminas A y C, y antioxidantes. Y con respecto a las patatas aportan carbohidratos de fácil digestión, además de fibra y potasio.