Casi veinte años después de su apertura, O Eirado da Leña puede presumir de ser el primer restaurante de Pontevedra con una Estrella Michelin. En el centro del casco antiguo de la capital se encuentra este local, regentado por el chef Iñaki Bretal, que ha sabido concinar el producto de proximidad con la excelencia que merece.
La Plaza da Leña, a escasos cinco minutos a pie del Mercado de Abastos, ofrece un emplazamiento único y muy especial, al tratarse de una plaza llena de vida y de luz en la que siempre hay bullicio. El chef pontevedrés ha sabido aprovecharlo y por eso sus menús son muy cambiantes y siempre dependen del producto de temporada.
Fresco, de temporada y de calidad
Cuando Iñaki comenzó con la aventura de O Eirado, en 2003, su objetivo no era conseguir una Estrella. "No buscábamos reconocimiento, queríamos ofrecer un producto de cercanía muy bien preparado. Lo que sí quería desde el principio era ser constante en la calidad: no vale de nada ser bueno hoy y malo mañana". Este cocinero define su carta como "un trabajo de equipo" muy pensado, creada con el fin de cocinar excelentes materias primas.
Su producto, principalmente del Mercado pontevedrés, "tiene mucho mar". Este chef se declara gran amante del peixe gallego: "por supuesto en nuestra carta hay grandes carnes, pero el pescado ofrece más matices de sabores, es un producto más fino y me gusta más".
Por eso, sus menús se centran en marisco y pescado, cocinados con mucho mimo y recetas muy originales. "Llevamos años haciendo lo que ahora la gente cree que es vanguardia", dice Bretal, "siempre nos gustó innovar y hemos probado fusiones que ahora están muy de moda".
Además, cada temporada cambia la carta para adaptarse al producto "hay días que en la plaza me ofrecen género menos habitual y también lo incluimos. Por ejemplo, hoy he comprado ameixóns y tendremos un plato especial los dos o tres días que nos duren". No obstante, asegura que su menú se adapta a lo que Pontevedra ofrece en cada momento.
Cerrando 2020 con alegría para empezar 2021 con esperanza
"En nuestra mano está que todo vaya a mejor", dice Iñaki. Junto a O Eirado se encuentra Loaira Tapas, que también pertenece al chef aunque tiene otro equipo y otra cocina. "La terraza que hay frente a O Eirado es de Loaira, hemos tenido que repartir el espacio para tener más mesas. Lo más importante es que se mantenga la distancia de seguridad y que, esperemos, podamos cerrar el primer trimestre con algo más de aforo".
El chef pontevedrés confía en que para Semana Santa las cosas hayan mejorado, aunque cree que "se podrían hacer las cosas mejor, todos tenemos ganas de salir pero no es el momento". La entrega de la Estrella Michelin a finales del año pasado les dio el empujón de alegría que necesitaban, después de haber cerrado todo el mes de noviembre, pero ven lejano volver a la normalidad de antes de la pandemia.
De todos modos, para el equipo de O Eirado la vida no ha cambiado, siguen trabajando con el mismo empeño y las mismas ganas que antes de recibir el galardón. "Siempre hay rumores, nosotros ya sospechábamos que nos iban a dar la Estrella este año, pero no hay que confiarse: desde el principio supe que íbamos a seguir haciendo lo mismo y centrándonos en ofrecer una cocina de gran calidad", dice Iñaki.
El chef afirma que ellos se conforman con esta situación, "no es lo ideal, pero por lo menos podemos mantener el local abierto (bajo mínimos) y que no parezca abandonado. Sé que la gente tiene ganas de salir, yo también las tengo; por eso es importante que nos comportemos, que respetemos las normas y que podamos tener un verano como se merece Pontevedra".
Hace así un llamamiento al buen hacer de los ciudadanos, pues en su mano está que todo salga bien y que el ritmo de contagios baje. Pero Bretal también aprovecha para dar un pequeño tirón de orejas a los políticos, "que deberían dejar de apretar y empezar a ayudar", haciéndose también eco de las muchas peticiones que está haciendo la hostelería gallega en esta difícil situación.